Para aumentar la conciencia sobre la relevancia de los polinizadores y las amenazas que enfrentan, en octubre de 2017, Naciones Unidas estableció el 20 de mayo como el Día Mundial de las Abejas.

Esta fecha, además, coincide con el nacimiento de Anton Janša, quien en el siglo XVIII fue pionero en las técnicas modernas de apicultura en Eslovenia.
Este día tiene como objetivo principal proteger a las abejas y otros polinizadores, contribuyendo así a abordar problemas relacionados con el suministro de alimentos y la lucha contra el hambre en los países en desarrollo.
Según el portal web de la ONU, en 2025, el lema para este día es “Las abejas se inspiran en la naturaleza para nutrirnos a todos”. Con esto, el organismo busca presentar el papel vital de las abejas y otros polinizadores en la restauración de los ecosistemas, la conservación de la biodiversidad y la seguridad alimentaria y la nutrición.
Recordemos que la polinización es crucial para la supervivencia de los ecosistemas, ya que casi el 90% de las plantas con flores dependen de este proceso para reproducirse. Además, el 75% de los cultivos alimentarios a nivel mundial y el 35% de las tierras agrícolas dependen de la polinización, lo que resalta su importancia para la seguridad alimentaria y la conservación de la biodiversidad.