De acuerdo a medios estadounidenses, la directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, despidió a dos altos funcionarios de inteligencia por un reciente memorándum que contradijo la narrativa de la Administración de Donald Trump, de que la desmantelada banda del Tren de Aragua opera en coordinación con el gobierno de Venezuela.
Los funcionarios despedidos, fueron Michael Collins, presidente interino del Consejo Nacional de Inteligencia y Maria Langan-Riekhof, vicepresidenta del consejo, ambos con décadas de experiencia en el análisis de inteligencia.
En este sentido, la jefa adjunta de gabinete de Gabbard, Alexa Henning, aseveró en una publicación en redes sociales que fueron despedidos «por politizar la inteligencia».
El mes pasado, el Consejo Nacional de Inteligencia, encargada de supervisar los análisis basados en información de las agencias de inteligencias del país, publicó un documento en el que detallaban la supuesta relación entre la extinta banda de el Tren de Aragua y el gobierno del presidente Nicolás Maduro.
Todas las demás agencias de inteligencia del gobierno estadounidense, a excepción del FBI, concluyeron que esta desmantelada organización delictiva no recibe órdenes del gobierno venezolano, ni opera en estrecha coordinación con él.
El gobierno de Donald Trump ha utilizado esta narrativa para invocar la Ley de Enemigos Extranjeros y enviar a migrantes venezolanos al Centro de Confinamiento para el Terrorismo (CECOT) en El Salvador bajo falsas acusaciones de ser miembros de esta organización criminal.