Más de 170 activistas internacionales que viajaban a Egipto para unirse a la Marcha Global a Gaza han sido retenidos/as y deportados/as desde el aeropuerto de El Cairo. Sin abogados, sin explicaciones, sin respeto a sus derechos. Lo que querían era denunciar el genocidio, el bloqueo y el apartheid que Israel impone sobre el pueblo palestino.
El ministro de Guerra israelí, Israel Katz, ordenó al ejército de ocupación bloquear el movimiento de activistas desde Egipto a Gaza, exigiendo a las autoridades egipcias que detuvieran a los «manifestantes yihadistas» por considerarlos una «amenaza para la seguridad de los soldados israelíes».

En respuesta, el Ministerio de Asuntos Exteriores egipcio afirmó la importancia de presionar a Israel para que levante el asedio al enclave palestino y permita el acceso humanitario, aunque también reiteró que cualquier acción propalestina de delegaciones extranjeras en su territorio debe obtener autorización previa.
Periodista Venezolana, Hindu Anderi entre los deportados desde Egipto
Esta advertencia se materializó con detenciones en El Cairo, cuando cientos de activistas de diversas organizaciones de manera independiente fueron deportados violentamente por las autoridades egipcias al intentar unirse a la Marcha Global hacia Gaza. Entre los deportados se encontraba la activista venezolana de la Plataforma Internacional de Solidaridad con la Causa Palestina, la periodista Hindu Anderi, quien junto a un grupo de venezolanos y venezolanas de distintas organizaciones viajaron hacia El Cairo, Egipto para participar en esta importante movilización.
«Nos obligaron prácticamente, o sea, nos botaron, nos empujaron ahí, y se generó un problema de violencia, porque empezaron a atacar a las personas que pacíficamente se sentaron en el piso del aeropuerto, porque no había una explicación coherente de por qué razón estaban sacando a la gente o por qué razón no nos dejaban entrar.» Manifestó Hindu Anderi desde Estambul.
Además destacó «cuando llegamos allí nos empujan prácticamente hacia la calle, es decir, hacia la parte exterior del aeropuerto, y nos obligaron a montarnos en un autobús que nos llevó a un avión y en ese avión nos devolvieron para Estambul».
Según informó el medio libanés, Al Mayadeen, fueron detenidos más de 170 activistas internacionales que intentaban participar en la Marcha Global a Gaza, de los cuales al menos 30 de los arrestados son ciudadanos españoles, además de 40 argelinos, libios y marroquíes, entre otros muchos de ellos ya con órdenes de expulsión del país.
Ante esta situación, las organizaciones solidarias han emitido un llamado a manifestar este 15 de junio en las embajadas de Egipto en todo el mundo. El objetivo de estas protestas es denunciar la complicidad del gobierno egipcio con el régimen de Israel, acusándolos de sabotear las iniciativas en favor del pueblo palestino e impedir la entrada de ayuda humanitaria a Gaza.
Seif Abu Kishk, uno de los organizadores, indicó que unos 4.000 activistas de 44 países habían reservado vuelos a El Cairo con la intención de marchar 50 km desde Arish hasta Rafah, en el lado egipcio de la frontera con Gaza. Mientras tanto, la caravana «Sumud», compuesta por tunecinos, argelinos, marroquíes y mauritanos, avanzó por Libia, recibiendo el apoyo de su primer ministro, Abdelhamid Dbeibah, y ahora espera la autorización para entrar a la nación egipcia.
Estos movimientos de solidaridad internacional, que incluyen la caravana «Sumud», la Marcha Global y la flotilla Madleen (interceptada previamente por Israel), buscan denunciar la crítica situación humanitaria en Gaza tras 20 meses de «guerra genocida» que ha dejado más de 45.000 palestinos fallecidos. La presión internacional sobre Israel crece para que permita el ingreso de más ayuda y alivie la escasez generalizada de alimentos y artículos de primera necesidad en la Franja.