La Asamblea Nacional de Venezuela sancionó este jueves la Ley Aprobatoria de la Convención sobre el establecimiento de la Organización Internacional para la Mediación (OIMed). Con la norma aprobada, el país suramericano otorga el rango de Ley de la República su adhesión al recién creado Organismo Internacional para la Mediación, impulsa por China.
Venezuela valora a la OIMed como una «iniciativa que se levanta como un bastión frente a quienes pretenden debilitar los espacios legítimos de diálogos entre las naciones», publicó el gobierno venezolano en un comunicado el 30 de mayo, fecha en la cual ratificó el ingreso al organismo de mediación.

«Con la sanción de esta ley, voy a proceder a prender una velita para que empecemos a hacer maletas y nos salgamos de toda esa cantidad de instrumentos que tiene el imperialismo norteamericano, supuestamente mediadores», dijo después de la aprobación de la ley, el presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez.
Rodríguez calificó de vergonzoso «como el alto comisionado para los DD. HH. de las Naciones Unidas hasta el momento no ha dicho nada de los 252 venezolanos secuestrados por el criminal de Nayib Bukele en El Salvador y los más de 70 mil muertos en Gaza».

¿Qué es OIMed?
La OIMed es considerada el primer organismo intergubernamental dedicado exclusivamente a la mediación internacional. Su creación representa un punto de inflexión en la arquitectura global, al ofrecer a los países del sur una herramienta concreta para intervenir en los principales debates geopolíticos, sin la intermediación de potencias hegemónicas.
¿Cuándo nació la OIMed?
El viernes 30 de mayo, en Hong Kong, nació la OIMed con la participación de 85 países procedentes de África, América Latina y Europa, así como de cerca de 20 organizaciones internacionales.
¿Su función? Lograr arreglos amistosos en disputas, diferencias y litigios entre Estados participantes. La organización es promovida por China y privilegia el diálogo como mecanismo efectivo en la resolución de diferencias en el derecho internacional.
Según dijo el Canciller de China, Wang Yi, la OIMed llena un vacío institucional en el campo de la mediación y la gobernanza mundial.
China ha dicho que el papel de la OIMed sí cumplirá con los principios de la Carta de la ONU, basados en la mediación y el diálogo internacional.
La propuesta se alinea con lo anunciado por el presidente Nicolás Maduro, quien calificó la adhesión de Venezuela a la OIMed como un paso histórico hacia la consolidación de un nuevo orden mundial justo, pacífico y multipolar.
El jefe de Estado venezolano afirmó que la Organización Internacional para la Mediación representa una alternativa real para la resolución de conflictos de índole comercial, político y social, basada en el respeto a la soberanía y el diálogo entre naciones.