Donald Trump desató una tormenta mediática tras publicar un video generado con inteligencia artificial en el que se muestra al también expresidente Barack Obama siendo arrestado por agentes del FBI en el Despacho Oval y luego tras las rejas, en una celda, mientras suena de fondo la canción “YMCA” de los Village People.
La publicación fue hecha a través de su red social Truth Social, y ha sido descrita por medios como una “pieza delirante” de propaganda digital. El clip, un deepfake de alta calidad, incluye además imágenes del expresidente Joe Biden y del exfiscal general Merrick Garland también tras las rejas. Todo con un mensaje que retuerce la famosa frase del propio Obama: «Nadie está por encima de la ley».
Según The Sun, el video originalmente circuló en TikTok antes de que Trump lo adoptara como propio, dándole una dimensión explosiva al compartirlo desde su perfil con millones de seguidores. La publicación fue acompañada simplemente con el texto “Nadie está por encima de la Ley”.
“Obama está de rodillas, esposado, en una celda», mientras el audio original lo muestra pronunciando esa frase que hoy Trump le lanza de vuelta como un bumerán político.
Este contenido llega pocos días después de que la excandidata presidencial Tulsi Gabbard afirmara que Obama y otros altos funcionarios participaron en una «conspiración para manipular al FBI y al Departamento de Justicia contra Donald Trump». En ese contexto, Economic Times relaciona la publicación como un intento de Trump de amplificar esa acusación;
“La imagen de Obama arrodillado, esposado y en prisión no es casual. Es una extensión visual de las denuncias de Gabbard sobre una ‘trama traicionera’” Reza.
En su análisis, el Washington Post señala que esta movida forma parte de lo que califica como una “guerra fría, y a veces caliente, entre Trump y sus predecesores”, rompiendo con la tradición de respeto entre exmandatarios.
A pesar de ser una obra evidentemente ficticia, el video ha sido visto por millones, y ha encendido alarmas sobre el uso de inteligencia artificial para moldear la narrativa política. Especialistas han advertido que el uso de deepfakes en este contexto puede ser una amenaza para la democracia.
Hasta el momento, ni Barack Obama ni sus representantes han emitido declaraciones públicas sobre el contenido.