Durante el 17º Encuentro Nacional del Partido de los Trabajadores (PT), que se desarrolló en Brasilia, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, acusó a su homólogo, Donald Trump y al bolsonarismo, de impulsar una injerencia externa “inaceptable” contra la economía brasileña.
Lula rechazó el arancel del 50 por ciento aplicado por los Estados Unidos (EE. UU.) a los productos brasileños, por lo que lo calificó de “tarifazo político” que traiciona al pueblo. Asimismo, señaló directamente a Eduardo Bolsonaro, hijo del expresidente Jair Bolsonaro, de actuar en contra de los intereses nacionales, afirmó que “un tipo que hacía campaña con la bandera de Brasil ahora va a EE.UU. a pedir sanciones contra su propio país”.
Afirmó que Brasil ya no depende de Washington, pues mantiene relaciones comerciales sólidas con China, India y decenas de países más. Añadió que la política de su Gobierno busca blindar al país frente a medidas unilaterales y fortalecer el multilateralismo. Recordó además la injerencia de EE.UU. en el golpe de Estado de 1964 y advirtió que no renunciará a la propuesta de una moneda alternativa al dólar, debatida en la reciente cumbre de los BRICS en Río de Janeiro.
Por último, Lula anunció que se postulará a la reelección en el 2026, si su salud se lo permite. Asimismo, resaltó logros sociales, como la salida de Brasil del mapa del hambre, y el lanzamiento de un plan de 842 millones de dólares para urbanizar favelas; sin embargo, reconoció que aún falta que los beneficios lleguen a toda la población.
