Ucrania y Rusia llevaron a cabo un intercambio de prisioneros de guerra bajo la fórmula «84 por 84», en un esfuerzo por aliviar las tensiones del conflicto que persiste desde 2022.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, anunció que 84 prisioneros de guerra, incluyendo tanto militares como civiles, regresaron a Ucrania. Algunos de estos civiles habían sido detenidos por las fuerzas rusas desde 2014, 2016 y 2017. Entre los militares liberados se encuentran defensores de Mariúpol, una ciudad que fue escenario de intensos combates durante la guerra.
Este canje se enmarca en un proceso diplomático más amplio que busca aliviar las tensiones del conflicto. En mayo de 2025, ambos países completaron un acuerdo para intercambiar 2.000 prisioneros de guerra, 1.000 de cada lado, en un proceso que se desarrolló en varias fases.

A pesar de estos avances en el intercambio de prisioneros, las conversaciones para un alto el fuego definitivo aún enfrentan obstáculos significativos. Las diferencias en las condiciones propuestas por ambas partes continúan siendo un desafío para alcanzar una paz duradera.
Este reciente intercambio de prisioneros representa un paso positivo en medio de un conflicto prolongado, ofreciendo una oportunidad para la reconciliación y la esperanza en una resolución pacífica del conflicto.
Trump «no quiere sancionar a Rusia»

La Casa Blanca ha confirmado que el presidente Donald Trump está comprometido en «agotar todas las opciones» para resolver el conflicto entre Rusia y Ucrania de forma pacífica. La portavoz Karoline Leavitt declaró que Trump prioriza la resolución pacífica del conflicto armado entre Kiev y Moscú y no escatimará esfuerzos en intentar lograr esa meta durante el próximo cara a cara con su par ruso Vladímir Putin en Alaska.
«El presidente quiere agotar todas las opciones para intentar llevar esta guerra a una resolución pacífica», afirmó la vocera.
La reunión entre Trump y Putin está programada para el 15 de agosto en la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, en Anchorage, Alaska. Este encuentro se llevará a cabo tras una videoconferencia preparatoria entre Trump, el presidente ucraniano Volodímir Zelenski y líderes europeos, organizada por el canciller alemán Friedrich Merz.
Durante esta videollamada, se presentó un plan de cinco puntos que enfatiza la necesidad de que Ucrania participe activamente en cualquier negociación sobre su territorio. Zelenski expresó su esperanza de que de la cumbre surja un alto el fuego.
çLos líderes europeos han insistido en que ninguna cesión territorial puede decidirse sin la participación de Kiev y han advertido que seguirán presionando a Rusia con sanciones si no hay avances hacia la paz.
Trump ha condicionado una segunda reunión con Putin a la obtención de respuestas claras y positivas en el primer encuentro, advirtiendo que, de lo contrario, habrá “consecuencias muy graves”. La Casa Blanca ha definido el próximo encuentro como un «ejercicio de escucha», pero Trump ha dejado claro que espera avances concretos hacia la paz.
Este reciente intercambio de prisioneros representa un paso positivo en medio de un conflicto prolongado, ofreciendo una oportunidad para la reconciliación y la esperanza en una resolución pacífica del conflicto.