El ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, expresó su profundo agradecimiento al ministro de Defensa de Colombia, General Pedro Sánchez, por la comunicación fluida y la cooperación sostenida entre las fuerzas militares de ambos países para enfrentar el narcotráfico en la frontera común. Padrino López destacó que esta colaboración ha facilitado importantes avances operacionales y ha allanado el camino para promover un territorio binacional de paz y desarrollo.

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Coordinación para la seguridad en la frontera
Padrino López señaló que el diálogo y la coordinación constante con Colombia permiten la ejecución de operaciones conjuntas y unificadas, destinadas a neutralizar grupos armados, narcotraficantes y a garantizar la tranquilidad de las comunidades fronterizas. Subrayó que esta cooperación es fundamental para consolidar la seguridad en las zonas fronterizas de Venezuela, particularmente en los estados Zulia y Táchira.
Objetivos comunes y resultados positivos
El ministro venezolano enfatizó que ambos países comparten la visión de transformar la frontera en una zona productiva, pacífica y libre de violencia y narcotráfico. Destacó que las fuerzas militares de ambos lados trabajan en conjunto para la defensa, desmontar campamentos ilegales y atacar las rutas del narcotráfico, lo cual se refleja en la destrucción de varias estructuras vinculadas a estas actividades ilícitas.
Asimismo, agradeció el apoyo recibido del presidente colombiano Gustavo Petro y destacó la voluntad compartida para ampliar la cooperación y alcanzar la estabilidad regional.

Un compromiso con la soberanía y la paz
Padrino López reafirmó que Venezuela mantiene una postura firme y patriótica en la defensa de su soberanía y seguridad nacional. Aseguró que la FANB continúa desplegada a nivel nacional para proteger el territorio y combatir el narcotráfico, manteniendo a Venezuela como un país libre de cultivos ilícitos, procesamientos y carteles.
Con un mensaje claro, destacó que la cooperación con Colombia no solo es estratégica, sino un compromiso para asegurar la paz y el desarrollo conjunto en una región que históricamente ha sufrido el impacto de la violencia y el crimen organizado.