Este 4 de octubre, Día Interamericano del Agua, cobra especial relevancia la iniciativa venezolana “Nuestras Costas, Nuestro Futuro”, que busca enfrentar uno de los desafíos más urgentes para la región y el planeta: promover el acceso equitativo y sostenible al agua potable.
Reconocido por la ONU como un derecho humano fundamental, el acceso al agua segura es esencial para la vida y el desarrollo comunitario. Según explican desde el proyecto,, fronteras y crisis ambientales dificultan hoy el derecho a este recurso vital.
En Venezuela, ese reto adquiere una dimensión prioritaria debido a la fragilidad de sus ecosistemas. En respuesta, la Universidad Metropolitana, junto a la ONG Vitalis, la Fundación Potabilis y con respaldo de la Unión Europea, lideran este proyecto pionero en el estado La Guaira que busca garantizar fuentes seguras de agua potable para comunidades costeras vulnerables.
Esta alianza simboliza el compromiso ciudadano, académico y político con soluciones integrales y sostenibles.
El proyecto apuesta por la instalación de sistemas de potabilización combinados con respaldo energético basado en energías renovables, respondiendo a las particularidades de las zonas rurales. Así, no sólo se garantiza agua segura sino que se promueve la soberanía energética, reduciendo la dependencia de combustibles fósiles contaminantes como el diésel.
Además, “Nuestras Costas, Nuestro Futuro” promueve el fortalecimiento de capacidades locales para operar y mantener estos sistemas, fomentando la autonomía comunitaria y el cuidado del medio ambiente.
Su enfoque integral contempla también la preservación de la biodiversidad marina y el impulso del desarrollo social y económico sostenible, clave para el bienestar presente y futuro de las comunidades.
El proyecto “Nuestras Costas, Nuestro Futuro” busca contribuir a la preservación de la biodiversidad marina y el desarrollo social y económico sostenible.