El grupo inversor liderado por el promotor inmobiliario Patrick Zalupski, los nuevos dueños de los Rays de Tampa Bay, prometieron este martes reparar el Tropicana Field (Trop) a tiempo para el inicio de la próxima temporada a finales de marzo, mientras simultáneamente intensifican la búsqueda de un nuevo estadio más cercano a la ciudad de Tampa que se espera inaugurar en 2029.
La necesidad de reparar el Trop es crítica, pues el estadio sufrió graves daños tras el paso del huracán Milton en el área de Tampa en 2024, forzando a los Rays a jugar toda la temporada 2025 en el George M. Steinbrenner Field, el hogar primaveral de los Yankees.

Hay que destacar que el grupo, con sede en Florida y encabezado por Zalupski, finalizó la semana pasada la compra del equipo por 1.700 millones de dólares al antiguo propietario, Stu Sternberg. Zalupski y otros altos ejecutivos, como Ken Babby y Bill Cosgrove, reafirmaron en la conferencia de prensa su intención de que el equipo permanezca definitivamente en el Área de la Bahía de Tampa.
Zalupski detalló que se está buscando un terreno de aproximadamente 40 hectáreas (100 acres) en la región que no solo albergue un estadio de béisbol con techo fijo o abovedado, sino que también cuente con tiendas, bares, restaurantes y otros servicios.
«Necesitamos un nuevo estadio. No creo que nadie lo discuta»
declaró el nuevo dueño.
El nuevo director ejecutivo del equipo, Ken Babby, reconoció el profundo descontento en la zona sobre la ubicación de la nueva sede, ante la especulación de una posible reubicación, pero la MLB ha reiterado su deseo de que el equipo se quede. Varios sitios ya han sido considerados, incluyendo el barrio de Ybor City, un colegio comunitario y un antiguo hipódromo.
Confirmando su compromiso a corto plazo, Babby indicó que para finales de esta semana se habrá instalado la mitad de los 24 paneles del techo del Tropicana Field, asegurando la disponibilidad del estadio para la próxima temporada de las Grandes Ligas.
A pesar de la búsqueda del nuevo hogar, los Rays están obligados a jugar en el Trop durante tres temporadas más, de acuerdo con el contrato de arrendamiento vigente con la ciudad de San Petersburgo.
Es importante recordar que los Rays se habían retirado en marzo de un proyecto de $1.300 millones para construir un nuevo estadio junto al Tropicana Field, citando el impacto del huracán y los probables incrementos en el costo de la propuesta original.