Una encuesta realizada por la reconocida firma YouGov reveló que la mayoría de los ciudadanos estadounidenses se opone rotundamente a cualquier intervención militar contra Venezuela. El estudio, difundido por la Cámara de Representantes de Estados Unidos, evidencia un creciente rechazo entre los norteamericanos hacia las políticas de confrontación impulsadas por el expresidente Donald Trump y su aliado político, el secretario de Estado Marco Rubio.
La pregunta central del sondeo fue directa: “¿Apoyaría o se opondría a que Estados Unidos use la fuerza militar para derrocar al presidente venezolano Nicolás Maduro?” De los encuestados, 53% manifestó su oposición, 18% dijo apoyarlo y 29% se mostró indeciso. La encuesta, aplicada entre el 5 y el 9 de septiembre de 2025 a una muestra representativa de 1.114 adultos estadounidenses, refleja un cambio notable en la percepción pública respecto a América Latina.

El estudio detalla que solo ocho votantes demócratas consideran positivas las agresiones contra Venezuela, mientras que 67 militantes del mismo partido se oponen totalmente. Entre los republicanos, 38 manifestaron su rechazo a las políticas de fuerza, 34 las apoyaron y 28 se declararon inseguros. Los votantes independientes también fueron categóricos: 52 en contra, 4 a favor y 34 indecisos.
La encuesta es hecha por una consultora muy apreciada en la política de EE.UU

La empresa YouGov, fundada en Londres en el año 2000 y con sede en Estados Unidos desde 2011, es una de las firmas más prestigiosas de sondeos de opinión a nivel global. Sus encuestas son citadas por medios como Reuters, The Economist, BBC, CNN y The New York Times, y sus resultados suelen tener un alto impacto en el debate político estadounidense. Su metodología digital, basada en muestras verificadas y ponderación demográfica, garantiza un alto grado de confiabilidad y precisión estadística.
La relevancia de este estudio radica en que contradice frontalmente la narrativa promovida por ciertos sectores políticos y mediáticos que han intentado justificar una intervención bajo el argumento del narcotráfico.
Mientras el discurso oficial de Washington ha tratado de asociar al gobierno venezolano con redes ilícitas como pretexto para legitimar sanciones y presiones militares, la opinión pública estadounidense muestra cada vez menos respaldo a ese tipo de acciones.
Según analistas, los resultados reflejan el cansancio del pueblo norteamericano tras décadas de conflictos externos fallidos —como Irak, Afganistán o Libia— y una creciente conciencia de que las “operaciones por la democracia” solo dejan devastación y crisis humanitarias.

Para Venezuela, el dato representa una victoria moral y política: la mayoría de los estadounidenses no quiere una guerra y considera que los problemas deben resolverse mediante el diálogo y la diplomacia.
El sondeo de YouGov deja claro que las estrategias de desinformación y criminalización mediática contra Caracas no logran convencer al ciudadano promedio estadounidense. Por el contrario, cada vez más personas reconocen que las intervenciones militares “empeoran a los países en lugar de mejorarlos”, como concluye el propio estudio.

