¿Acaso Trump se aferrará a un apretón amistoso con otro líder del mundo, lo jalará, o se enfrentará a un muro de concreto?
El presidente de Estados Unidos tiene a todos acostumbrados a su lenguaje exagerado y lleno de hipérboles. Para él todo es «huge» (gigante), «the best of» (el mejor de), «no one ever before» (nunca nadie antes), o «tremendous» (tremendo).
Sin embargo, sus gestos, miradas y el lenguaje corporal cuando se encuentra con otros líderes revelan mucho más de lo que parece a simple vista
Casi todas las apariciones públicas de Trump son un episodio de protocolo social fallido.
Pero veamos, una a una las más representativas:
Xi y Trump: China ganó hasta en el lenguaje
Salían Xi Jinping y Donald Trump después de verse en la reunión de este 30 de octubre:
Xi Jinping no habla. Trump se acerca a hablarle al oido. Xi no se inmuta, está recto, serio, tenso, como quien está a disgusto, pero diplomáticamente no se puede largar. Y de ahí sale la imagen del día: es Donald Trump quien se acerca y Xi Jinping ni lo mira.
«Ya no es la percepción de que un hegemón está hablando con un ascendente, sino de que estamos viendo la relación entre dos potencias prácticamente al mismo nivel con sus preocupaciones. La cara de Xi Jinping es de que algo de lo que ha sucedido en el interior de esta reunión le ha descuadrado», dicen los expertos de medios de comunicación.
Y es que desde el comienzo, cuando se quedaron solos en la mesa negociadora, Xi Jinping le dejaba claro: «No tenemos por qué estar de acuerdo en todo».
Momento surrealista entre Trump y Meloni: apretón de manos interminable de 15 segundos
El 13 de octubre de este año, durante la cumbre internacional celebrada en El Cairo, el encuentro entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, dejó una de las escenas más comentadas del día.
Ambos líderes protagonizaron un apretón de manos que se extendió durante varios segundos, mientras intercambiaban sonrisas tensas y frases breves ante las cámaras. Las imágenes, difundidas por cadenas internacionales y viralizadas en redes sociales, muestran a Trump insistiendo en mantener el contacto mientras Meloni intentaba soltar la mano con elegancia, sin romper la compostura.
El gesto fue interpretado por analistas como una muestra del estilo dominante de Trump, acostumbrado a utilizar el lenguaje corporal como herramienta política.
Trump rompe el protocolo dos veces a los pocos minutos de aterrizar en Reino Unido
Las cámaras han captado un nuevo gesto polémico de Trump rompiendo el protocolo, al tocar en dos ocasiones al príncipe Guillermo y al rey Carlos después de estrecharles la mano. Un episodio que recuerda a su primera visita de Estado, cuando fue criticado por caminar por delante de la difunta reina Isabel II.
En aquella primera visita del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a Reino Unido (4 de junio de 2019), los gestos del mandatario norteamericano se saltaron completamente las normas de protocolo ante la reina Isabel II.
Trump saludó a la monarca, con el puño cerrado antes de darle la mano.
Tampoco gustó a los ingleses el momento en el que Trump puso su mano sobre la espalda de la reina, dando incluso algunas palmadas, que no parecieron molestar a Isabel II.
¿Utilizará la vieja maniobra del jalón y la palmada para desequilibrar a la víctima de su saludo.
¿No captará la señal para dar la mano, como lo hizo con la canciller alemana Angela Merkel?
La mayoría de los observadores está lista para proyectar sus propias emociones acerca de la presidencia de Trump en cada episodio de protocolo social fallido
