La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó este martes casi por unanimidad la ley para forzar al Departamento de Justicia a publicar los documentos del pedófilo multimillonario Jeffrey Epstein y la envió al Senado, que tendrá que validarla antes que la ratifique el presidente, Donald Trump.

La propuesta de ley exige al Departamento de Justicia a publicar «todos los registros, documentos, comunicaciones y materiales de investigación no clasificados que obren en poder su y que estén relacionados con la investigación y el enjuiciamiento de Jeffrey Epstein».
«Esto incluye materiales relacionados con Ghislaine Maxwell, registros de vuelos y viajes, y personas nombradas o mencionadas (incluidos funcionarios gubernamentales) en relación con la investigación y el enjuiciamiento de Jeffrey Epstein», recoge el documento.
Pero, el hermano del pedófilo Epstein, Mark Epstein, indicó que los archivos judiciales que están próximos a ser revelados están siendo sometidos a un proceso de «desinfección».
Mark Epstein declaró a News Nation que, »Hay una instalación en Winchester, Virginia, donde están limpiando los archivos para quitar nombres republicanos de los documentos».
La acusación del hermano del pedófilo Epstein indica que la información clasificada que saldrá a la luz pública estaría siendo alterada políticamente, lo que socava la transparencia y la integridad de los registros judiciales y las investigaciones relacionadas con el caso Epstein.
Apoyo unánime a la propuesta
Como había advertido el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, la propuesta de desclasificar los Archivos Epstein contó con un apoyo prácticamente unánime, pues solo votó en contra Clay Higgins, republicano de Luisiana.
Aun así, Johnson confió en que el texto de la propuesta se enmendará cuando se tramite en el Senado, lo que podría modificar la versión y extender el tiempo que podrá entrar en vigor.
«Esta legislación que se aprobará hoy es defectuosa y debe ser enmendada. La pregunta es, ¿por qué no la enmendamos aquí antes de aprobarla? Porque los autores no lo permitirán», declaró el líder de la Cámara antes de la votación.
La unidad de los republicanos para apoyar la ley, después de meses ignorando las peticiones de los demócratas para hacerlo, responde a un giro de guión de Trump, quien en un inicio era contrario y luego dijo que estaba dispuesto a firmar la ley.
Algunos de los documentos que se han revelado en los últimos meses relacionados con el pederasta han incrementado la presión sobre el presidente, quien tuvo una íntima relación con el pedófilo Epstein, desde finales de los años 80 hasta principios de los 2000.
«Todos los demócratas eran amigos de Epstein, y es un engaño. Todo es un engaño. Y no quiero que esto opaque la grandeza de lo que el Partido Republicano ha logrado en los últimos tiempos», repitió este lunes en el Despacho Oval.
Las víctimas piden justicia y transparencia
Taylor Greene, una firme aliada de Trump que en los últimos días ha protagonizado un enfrentamiento con el mandatario por el caso Epstein, aseguró que las mujeres que la acompañaban no son víctimas, sino sobrevivientes y cargó contra el presidente por llamarle «traidora» tras sumarse a la petición.

«Estas mujeres han librado la batalla más horrible que ninguna mujer debería tener que librar, y lo han hecho uniéndose y sin rendirse nunca. Eso es lo que hicimos al luchar tan duramente contra las personas más poderosas del mundo, incluso contra el presidente de EE.UU., para que esta votación se llevara a cabo hoy», afirmó.
Los demócratas cuestionan a Trump
Por su parte, los demócratas aseguraron que si el presidente realmente quisiera publicar los archivos de Epstein ya lo habría hecho porque «es evidente» que el Departamento de Justicia, en cuyas manos se encuentra el material, actúa como un «títere» del mandatario.
El cambio de postura de Trump, para los miembros del Caucus Hispano se debe a que no quiere ser visto como un «perdedor» en el Congreso y coincide con el incremento de la presión pública tras la publicación la semana pasada de unos 23.000 archivos que incluyen correos de Epstein que sugieren que el ahora presidente sabía de sus crímenes y participó de sus fiestas íntimas.

