El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, realizó este martes una serie de declaraciones que endurecen la postura del Kremlin respecto a Europa, Ucrania y el plan de paz impulsado por el presidente estadounidense Donald Trump.
Durante una rueda de prensa, el canciller acusó directamente a la Unión Europea (UE) de haber “fracasado en todos los aspectos” relacionados con la resolución del conflicto ucraniano desde 2014, al tiempo que afirmó que la ideología y práctica del “nazismo” están “legalizadas” en Ucrania y fomentadas por los líderes europeos.

Lavrov aseguró que Moscú dispone del plan de Trump, pero destacó que Washington aún no lo ha entregado de manera oficial. Según su explicación, Rusia espera recibir una “versión preliminar” del documento una vez que Estados Unidos lo termine de revisar con Kiev y con las principales capitales europeas.
A su juicio, el contenido del plan actual coincide con los puntos discutidos anteriormente entre Moscú y Washington, particularmente los contactos realizados en Alaska (Anchorage).
Lavrov: la UE al verse fuera de la negociación filtró otra propuesta

Sin embargo, cuestionó la reciente filtración del borrador del plan, calificándola como un intento de “saboteo” destinado a modificar la iniciativa para ajustarla a los intereses europeos. Dentro de las reacciones de líderes de Europa occidental, destacó especialmente la del presidente francés Emmanuel Macron, quien calificó el plan como una “capitulación ante Rusia”.
Lavrov replicó que Europa no está en condiciones de imponer condiciones, ya que, según él, ha fallado repetidamente en sus responsabilidades diplomáticas.
El jefe de la diplomacia rusa también destacó el papel de Bielorrusia en momentos críticos del conflicto, señalando su importancia tanto en la firma de los Acuerdos de Minsk como en los diálogos preliminares posteriores al inicio de la operación militar rusa en Ucrania en febrero de 2022.

Lavrov profundizó en su crítica a la UE acusándola de mantener una “mentalidad colonial” al abordar la seguridad regional. Afirmó que Europa no tiene interés en coordinar enfoques comunes y que evita temas clave como los desarrollos en Transcaucasia y Asia Central. En contraposición, aseguró que Rusia busca un esquema de seguridad euroasiático basado en el equilibrio de intereses y libre de imposiciones.
En sus declaraciones, Lavrov sostuvo que Europa “fomenta el nazismo” al afirmar que Ucrania lucha por sus valores tradicionales. El ministro aseguró que tanto la ideología como la práctica del nazismo están “legalizadas” en Ucrania, y citó casos recientes en los que militares ucranianos lucen símbolos asociados históricamente a unidades nazis como las “SS” o el wolfsangel.

Respecto al rol europeo en el conflicto, recordó que en 2014 la UE actuó como garante de un acuerdo entre el entonces presidente ucraniano Víktor Yanukóvich y la oposición, pero que, cuando el compromiso fue roto por los opositores al día siguiente, Europa “simplemente se encogió de hombros”. Desde entonces, según Lavrov, cualquier nuevo avance fue saboteado, lo que —a su juicio— prueba que Europa no está en capacidad de liderar una solución diplomática.
Lavrov también respondió a recientes declaraciones del presidente Macron, calificándolas como “extremadamente agresivas”. El canciller insistió en que Europa tuvo múltiples oportunidades para contribuir a la paz y que todas fueron desperdiciadas. Por ello, reafirmó que Europa “ha fracasado en todos los aspectos desde 2014” y que no puede pretender controlar las negociaciones actuales.

