El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez, afirmó este jueves que la política de Estados Unidos contra el país suramericano persigue dos objetivos centrales: apropiarse de sus recursos naturales estratégicos y erosionar la identidad nacional mediante la estigmatización de los venezolanos. Las declaraciones fueron ofrecidas durante una reunión del Consejo Nacional por la Soberanía y la Paz, en Caracas.
“Hay dos objetivos que persiguen quienes nos agreden en los actuales momentos, dos: primero […], es el petróleo […], las tierras raras, el agua. Siempre fue ese el primer objetivo. Pero el segundo es la destrucción del ser venezolano”, sostuvo Rodríguez, al denunciar una campaña sostenida de criminalización contra la migración venezolana.

Para sustentar su señalamiento, el dirigente socialista recordó declaraciones recientes de la opositora María Corina Machado, quien, tras recibir el Premio Nobel de la Paz, afirmó falsamente que “el 60 % de los venezolanos trabaja para cárteles de la droga”.
Rodríguez calificó esas afirmaciones como peligrosas y alineadas con el discurso de sectores del Gobierno estadounidense. “Concita la risa, de lo absurdo y de lo imbécil que es, pero es peligrosísimo”, dijo, al señalar que desde Washington se presenta a los migrantes como “plaga”, “criminales” o “enfermos mentales”.

En ese contexto, Rodríguez advirtió que esa narrativa busca convertir a Venezuela en “culpable de todos lo malo que ha ocurrido en este planeta”, una lógica que, a su juicio, responde a prácticas supremacistas y fascistas. “Así nos ven, así nos quieren convertir”, remarcó.
El parlamentario también respondió a declaraciones del subjefe de Gabinete de la Casa Blanca, Stephen Miller, quien respaldó la tesis del presidente Donald Trump de que Venezuela “robó” su petróleo. Miller escribió que “el sudor y el ingenio estadounidense crearon la industria petrolera en Venezuela” y calificó la nacionalización de los años setenta como “una expropiación tiránica”.
Rodríguez habló de Citgo y el saqueo Yankee

Rodríguez rechazó esas afirmaciones y recordó la confiscación de Citgo, valorada en unos 35.000 millones de dólares, así como los beneficios históricos obtenidos por empresas extranjeras en condiciones que calificó de lesivas para el país.
Mencionó, además, la extracción de millones de barriles en el estado Zulia y las consecuencias ambientales en Lagunillas, así como los privilegios concedidos durante la dictadura de Juan Vicente Gómez.
“Quien se atrevía a ir contra esas prerrogativas […] lo tumbaban sin fórmula de juicio”, afirmó Rodríguez, al recordar los derrocamientos de Isaías Medina Angarita, Rómulo Gallegos y el golpe de Estado contra Hugo Chávez en 2002, que duró 47 horas debido a la movilización popular.

En el plano internacional, las agresiones se intensificaron tras nuevas acciones de Washington, incluyendo operaciones militares contra supuestas narcolanchas y la orden de “bloqueo total” a petroleros vinculados a Venezuela, además de la designación del Gobierno de Nicolás Maduro como “organización terrorista extranjera”. Trump sostuvo que EE.UU. quiere “de vuelta” el petróleo que considera suyo.
Maduro calificó de “fake news” los argumentos de lucha antidrogas y acusó a EE.UU. de usar pretextos para justificar agresiones. Caracas reiteró que mantendrá sus exportaciones de crudo y defenderá la libre navegabilidad, mientras varios países han condenado las medidas estadounidenses, que Venezuela califica de “piratería”.

