La XII Cumbre Extraordinaria de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) concluyó este lunes en Venezuela con un llamado a la unidad regional y la defensa de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC).
Los líderes presentes reafirmaron su compromiso con la integración latinoamericana y caribeña, destacando la importancia de fortalecer los mecanismos de cooperación económica y política en la región.
El presidente cubano Miguel Díaz-Canel enfatizó la necesidad de preservar la CELAC como el espacio legítimo de diálogo y concertación política para los 33 países de la región. Subrayó la importancia de mantener los principios fundacionales de este organismo en el contexto actual. Díaz-Canel también abogó por fortalecer una agenda económica basada en la complementariedad dentro del ALBA-TCP, aprovechando las potencialidades de cada país miembro.
Por su parte, el presidente venezolano Nicolás Maduro hizo un llamado:
«salvar la CELAC como esfuerzo histórico después de 200 años. El próximo año, en junio, estaremos conmemorando y todos estos meses estaremos conmemorando los 200 años de la convocatoria y realización del Congreso de Panamá para la unión en un solo bloque de toda nuestra América, antes colonia, hoy en lucha por nuestra libertad».
La CELAC desde su creación en 2011 ha buscado profundizar el diálogo respetuoso entre los países de la región en áreas como desarrollo social, educación, desarme nuclear, agricultura, cultura, finanzas, energía y medio ambiente.
La XII Cumbre Extraordinaria del ALBA-TCP reafirma así el compromiso de sus miembros con la construcción de una América Latina y el Caribe más unida, integrada y capaz de enfrentar los desafíos globales desde una posición de mayor fortaleza y autonomía.
