Un avión de carga de la aerolínea UPS se estrelló la tarde del martes en la ciudad de Louisville, estado de Kentucky (EE.UU.), provocando al menos siete muertos y once heridos, según informaron las autoridades locales.
La aeronave, un modelo McDonnell Douglas MD‑11 con matrícula N259UP, había despegado del Louisville Muhammad Ali International Airport con destino a Honolulu, Hawái.
En un vídeo tomado poco antes del siniestro, se observa que el avión volaba a baja altura con llamas en su ala izquierda antes de estrellarse y explotar, generando una gran columna de fuego.
El gobernador de Kentucky, Andy Beshear, informó que entre los fallecidos hay personas que estaban en tierra, fuera de la aeronave, y que el número podría aumentar.
Las condiciones de los heridos son graves en muchos casos. El aeropuerto fue cerrado y se decretó una orden de confinamiento en un radio de 8 km alrededor del lugar del accidente debido a los incendios provocados.
El avión era muy viejo
La aeronave tenía unos 34 años de antigüedad, había comenzado a operar con UPS en 2006, y pertenecía a un tipo convertido de pasajeros a carga.
Las autoridades federales —la Federal Aviation Administration (FAA) y la National Transportation Safety Board (NTSB)— ya investigan las causas del accidente, entre las que se plantea la posible separación de un motor como factor clave.
El hub de UPS en Louisville es un centro logístico vital: procesa más de 400 000 paquetes por hora y genera miles de empleos locales. El choque, además de la tragedia humana, representa un golpe para la cadena de suministro de la compañía.
Este incidente ocurre en un momento de tensión para la aviación por el cierre parcial del Gobierno federal, que según funcionarios ha introducido riesgos en la vigilancia del tráfico aéreo, aunque no se ha confirmado que el accidente tenga vinculación directa con esa situación.
Las autoridades piden evitar acercarse a la zona del accidente, por los restos esparcidos, los incendios activos y el riesgo de explosiones.
El trágico suceso deja una ciudad conmocionada y plantea interrogantes sobre la seguridad de las operaciones de carga aérea y el mantenimiento de aeronaves de mayor antigüedad.
