La ausencia prolongada de María Corina Machado alimentó esta semana las especulaciones sobre una posible salida de Venezuela, luego de que la propia dirigente instalara el tema al bromear públicamente con la idea de ir a Oslo a buscar el Premio Nobel de la Paz junto al presidente ecuatoriano Daniel Noboa. Su última aparición en video fue el 12 de noviembre.
El 14 de noviembre, medios internacionales reportaron que el Comité Noruego del Nobel había confirmado la presencia de Machado en Oslo los días 9 y 10 de diciembre. Dos días después, la opositora publicó un audio sin video, lo que intensificó las sospechas en redes de que ya no estaba en el país. Usuarios conocidos por seguir de cerca los movimientos de figuras opositoras aseguraron que había salido discretamente.
Machado reapareció el 18 de noviembre con un video en el que lucía bronceada, mientras el dirigente chavista Diosdado Cabello afirmó contar con “videos y grabaciones” que demostrarían su salida. El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, agregó presión al anunciar que acompañará a Machado a Noruega y fijó las fechas de su propio viaje entre el 6 y el 11 de diciembre.
Las dudas coinciden con un momento de alta tensión política: el 14 de noviembre Donald Trump aseguró tener “una decisión tomada” sobre Venezuela, generando expectativas de sectores opositores en el exilio. Sin embargo, dos días después matizó y dijo estar dispuesto a dialogar con Nicolás Maduro. En este contexto, siguen abiertas las preguntas sobre si Machado viajó por seguridad o por el giro inesperado en la estrategia internacional de su principal aliado político.

