El expresidente de Bolivia, Luis Arce, fue detenido este miércoles en la ciudad de La Paz en un procedimiento que su entorno califica como irregular y políticamente motivado.
La denuncia fue hecha pública por la exministra de la Presidencia, María Nela Prada, quien difundió un video asegurando que el exmandatario fue “secuestrado de manera totalmente ilegal” en la zona de Sopocachi, al oeste de la capital boliviana.
Según relató Prada, Arce se desplazaba solo en su vehículo para recoger a su esposa cuando fue interceptado por “personas encapuchadas”, quienes lo introdujeron por la fuerza en una camioneta sin presentar ninguna orden de aprehensión.
“En realidad no sabía si eran policías los que se lo habían llevado, no sabía si eran delincuentes, no sabía realmente nada. Su familia tampoco”, afirmó durante una entrevista, en la que añadió que el operativo careció de cualquier notificación legal previa. También cuestionó que, en su condición de expresidente, Arce debió ser sometido a un juicio de responsabilidades, tal como establece la ley boliviana.

Horas después, medios locales confirmaron que Arce había sido trasladado a la sede de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), donde permanece detenido para brindar declaraciones.
El vicepresidente Edmand Lara publicó un video felicitando la labor de la policía y reafirmando el carácter anticorrupción del Gobierno de Rodrigo Paz.
“Lo habíamos dicho en una oportunidad: Luis Arce va a ser el primero en entrar preso y estamos cumpliendo. Todos los que le han robado esta patria van a devolver hasta el último centavo y van a rendir cuentas a la justicia”, declaró.
Luis Arce irá a juicio

La Fiscalía General del Estado acusa a Arce de incumplimiento de deberes y conducta antieconómica, en el marco de la investigación por el presunto desfalco al Fondo de Desarrollo para los Pueblos Indígenas Originarios y Comunidades Campesinas (Fondioc).
La Contraloría detectó irregularidades en la documentación y la existencia de proyectos fantasma, así como desembolsos que habrían sido dirigidos a cuentas personales. Por la misma trama fue detenida también la exdiputada Lidia Patty Mullisaca.
El caso se remonta a la gestión de Arce como ministro de Economía, periodo en el cual —según la Fiscalía— se habrían autorizado movimientos financieros irregulares. No obstante, Prada sostiene que no existía ninguna causa formal contra el expresidente y que él mismo había manifestado su disposición a cooperar con la justicia.
“Después de dejar la presidencia, se mantuvo en nuestro país, estuvo dando clases y siempre declaró ante los medios que iba a permanecer aquí y atender cualquier requerimiento”, reiteró.

La exministra cuestiona que ni la defensa de Arce ni su familia han sido informados oficialmente sobre su estado ni sobre su acceso a abogados, lo que “debería suceder en el marco de cualquier proceso para cualquier ciudadano en Bolivia”.
Prada alertó además que el operativo podría tener motivaciones políticas, en un contexto de alta polarización y de discursos que buscan “sepultar 20 años de liderazgo del MAS”, pese a los avances sociales y económicos alcanzados durante ese periodo.

