Un tema importante a considerar son las consecuencias decisivas del próximo paso de Estados Unidos e Irán en Irak y Siria.
Una etapa crucial para el futuro de la región.
Las Fuerzas de Movilización Popular y los líderes políticos cercanos a la resistencia, así como sus recursos militares y económicos, serán el objetivo.
Se llevará a cabo la eliminación física de comandantes y figuras influyentes como Qais Al-Khazali, Akram Al-Kaabi, Al-Mohammadawy, Hadi Al-Amiri, Nouri Al-Maliki y otros individuos influyentes.
La infraestructura militar de las Fuerzas de Movilización Popular, Kata’ib Hezbolá y Asa’ib será atacada.
Este es exactamente el mismo escenario que caracteriza a Hezbolá, Hamás, Yemen e Irán, que también experimentaremos en Irak.
Se prevé una tragedia que llevará la situación interna de Irak al punto de estallido, similar a la del Líbano, y a la gran bipolaridad del desarme.
Irak es el último y más importante bastión militar y defensivo de Teherán, a menos que Teherán actúe en contra de su estrategia defensiva de los últimos dos años e inicie una nueva guerra en Irak y Siria.
El cumplimiento de los objetivos estadounidenses e israelíes en Siria se completará con el desarme total de los grupos de resistencia iraquíes, cambios políticos y el fortalecimiento de los grupos aliados. Por otro lado, debilitar la influencia de Turquía también estará en la agenda.
Es crucial saber qué sucederá a continuación y cuál será el resultado.
Por Seyed Mohammad Jawad Hosseini, Analista Internacional

