«¿Qué hacen en bóxers en su cuarto?»
La Fiscalía General del Estado de Ecuador abrió una investigación contra el Cura Diego Sosa, acusado de presunto abuso sexual, tras ser sorprendido en su vivienda en Olón (provincia de Santa Elena) con tres menores de edad en ropa interior. El caso ha generado conmoción nacional y un amplio repudio en la sociedad civil, la Iglesia y el poder político.
El video que desató la polémica
La denuncia surgió luego de la circulación de un video en redes sociales en el que vecinos increparon al cura frente a su casa, tras verlo salir de la iglesia con varios adolescentes. Cuando se le exigió abrir la puerta, los presentes lo confrontaron al encontrar a menores dentro.
Ante la pregunta directa: «¿Qué hacen en bóxers en su cuarto?», el sacerdote evitó responder. Solo aseguró que los jóvenes eran sus “amigos” y “acólitos”, insistiendo en que “todos son libres”. La evasiva encendió aún más la indignación de la comunidad.
La respuesta del sacerdote
Tras la viralización del video, el cura Sosa publicó una grabación en la que se defendió de las acusaciones:
“Estoy abierto a cualquier acción que tome la Justicia y la Iglesia. Eran tres menores de edad que me acompañan la mayor parte del tiempo”, aseguró. Según él, lo ocurrido forma parte de un “ataque planificado y estratégico contra la Iglesia”.
La reacción institucional

La Diócesis de Santa Elena emitió un comunicado en el que subrayó su política de “cero tolerancia e impunidad ante cualquier acto inmoral”. En consecuencia, el obispo dispuso la separación inmediata de Sosa de su oficio pastoral, hasta que concluyan las investigaciones civiles y canónicas.
Del mismo modo, la Gobernación de Santa Elena afirmó en su página oficial que corresponde a la justicia determinar si existió un delito por parte del cura, establecer responsabilidades y aplicar las sanciones pertinentes.
Repercusiones políticas
La presidenta de la Comisión de Niñez y Adolescencia de la Asamblea Nacional, Viviana Veloz, condenó lo sucedido:
“Lo ocurrido en Olón la noche del 15 de agosto no puede pasar desapercibido ni quedar impune. Las imágenes y testimonios que circulan son profundamente alarmantes”.
Agregó además que “la fe no puede ser excusa ni escudo para el abuso. Todas y todos tenemos el deber moral y legal de proteger a la niñez”. respecto del caso del cura.
En la misma línea, la congresista Sara Oviedo, de la Coalición de Lucha contra la Violencia Sexual en Espacios de Fe, reveló que Sosa ya había sido cuestionado en otras parroquias: “Lo sacaron de San Miguel del Común de Oyacoto, en Quito, porque lo iban a linchar. Luego lo trasladaron a Manglaralto, donde habría ocurrido lo mismo”, señaló en sesión parlamentaria.
Fiscalía: once casos en curso contra curas

Este episodio se suma a una investigación más amplia. Según informó la Fiscalía, actualmente se procesan once casos de presunta violencia sexual cometida por religiosos en Ecuador, de los cuales diez permanecen en etapa previa y uno ya se encuentra en fase procesal.