En el marco del Día Internacional de la Familia, familiares de los venezolanos ilegalmente detenidos en el Centro de Confinamiento del Terrorismo (CECOT), de El Salvador, en la base de Guantánamo y en diversos centros de detención en Estados Unidos se congregaron este jueves en Caracas para clamar justicia y demandar la liberación inmediata de sus seres queridos.
En una rueda de prensa con medios nacionales e internacionales, este grupo, ahora constituido como el Comité de Familiares Secuestrados, alzó su voz contra la flagrante violación de los derechos humanos y el uso político de sus allegados.
«Este día para todos está siendo marcado por una lucha incansable por defender nuestra familia, para que sea reunificada, para que nuestros migrantes perseguidos vuelvan», expresó una de las voceras.
«El reencuentro de Maikelys con su madre nos demostró que la lucha vale la pena, que hay esperanza pero aún hay 252 familias rotas», declaró otra integrante del Comité.
Las imágenes recientes del CECOT, difundidas en redes sociales, revelaron el hacinamiento y las violaciones sistemáticas a los derechos humanos que sufren los detenidos. «Nuestros hijos están en campos de concentración, sin acusaciones ni juicios. (Nayib) Bukele los usa como moneda de cambio político contra Venezuela», denunciaron.
El Comité responsabilizó al presidente salvadoreño, Nayib Bukele, de violar convenios internacionales y criminalizar la migración. «¿Por qué los mantienen presos si no hay pruebas? Exigimos respuestas», cuestionó un familiar.
Asimismo, denunciaron que su silencio normaliza la tortura, mientras organismos internacionales no actúan. «El pueblo salvadoreño no puede ignorar esto. Nuestros hermanos no son delincuentes, son víctimas de una persecución racista y xenófoba», afirmó una madre.
En un llamado final, pidieron solidaridad internacional. «No normalicemos el dolor. A nuestros familiares no se les respetó el debido proceso. Esto debe parar. ¡No descansaremos hasta ver a cada uno de los 252 regresar a casa!», enfatizaron.

