La temporada 2025-26 de la NBA, con solo una semana de acción, ha presenciado la ruptura de un récord colectivo que evidencia el cambio de enfoque del mejor baloncesto del mundo hacia la ofensiva, confirmando que el juego ha evolucionado significativamente.
En apenas un puñado de partidos, se han registrado 16 casos de jugadores que han anotado 40 o más puntos en un solo juego durante la naciente zafra, un hecho sin precedentes en la historia de la liga, ya que no es común ver a los jugadores exhibir un rendimiento tan alto en los primeros encuentros del torneo. Este fenómeno subraya la adaptabilidad y el talento ofensivo de la nueva generación de estrellas.

Los protagonistas del récord de 40 puntos
Algunas estrellas han destacado aún más al conseguir múltiples hazañas de 40 puntos en esta primera semana, como es el caso de Austin Reaves y Luka Doncic de Los Angeles Lakers, y Tyrese Maxey de Filadelfia, quienes ya registraron dos juegos de 40 anotaciones como mínimo cada uno.
Adicionalmente, otros 16 jugadores ya tienen, hasta ahora, al menos un partido de 40 puntos, incluyendo nombres importantes como Aaron Gordon, Anthony Edwards, Cam Thomas, Giannis Antetokounmpo, Jamal Murray, Jaylen Brown, Lauri Markkanen, Shai Gilgeous-Alexander, Stephen Curry y la sensación Victor Wembanyama.
Datos que confirman la tendencia
Este impresionante registro duplica casi el récord anterior de la NBA para el inicio de temporada, ya que en promedio, la liga registra 2.4 casos en los que un jugador anota 40 o más puntos en los primeros cuatro partidos de una campaña, y el récord anterior en este tipo de eventos era de solo nueve, hace tres cursos.
Las estadísticas tempranas, aunque con una muestra pequeña, indican claramente una tendencia al alza en la anotación, con un promedio de 236.6 puntos por partido en los encuentros de esta temporada hasta antes del martes, lo que representa un aumento del 7.6 % con respecto a la puntuación obtenida en cuatro partidos para cada equipo la temporada pasada.
Esta explosión ofensiva se acompaña de un aumento en la frecuencia de los lanzamientos desde la línea de castigo, pues los equipos han lanzado más tiros libres que en cualquier momento en los últimos 30 años, lo que también contribuye al incremento general en la puntuación de los encuentros.

