Familiares de migrantes venezolanos detenidos en la cárcel de máxima seguridad CECOT, en El Salvador, se movilizaron nuevamente este martes hacia la sede del Sistema de Naciones Unidas en Caracas para exigir un pronunciamiento oficial y ser atendidos por representantes del organismo.
La manifestación, pacífica y sostenida, incluyó una caminata por el este de la ciudad y plantea extender su presencia a 24 horas frente a la sede, con una vigilia en oración por los venezolanos que fueron retenidos sin justificación y sin cargos claros.
“Estamos llevando esta palabra para decirle al presidente Bukele que nuestros hijos no son mercancía para negociar. Nosotros no somos políticos, somos padres y madres trabajadores”, declaró José Medina, familiar de uno de los venezolanos secuestrados.
Por su parte, Mirelis Cacique López, otra vocera del grupo, recordó que hace más de una semana entregaron una carta formal a la ONU y aún no han recibido respuesta. «Estamos acá ante la sede de la ONU para pedir que seamos recibidos porque queremos conversar con ellos sobre la situación crítica que estamos viviendo. Queremos un pronunciamiento, ya que sí nos han atendido en otra oportunidad pero han pasado varios días. Estamos acá de manera pacífica, en representación de nuestros familiares”.
Los manifestantes expresaron su preocupación por las condiciones en las que se encuentran los detenidos, muchos de ellos jóvenes que migraron en busca de oportunidades y ahora permanecen encerrados en un penal de máxima seguridad, en total violación de sus derechos.
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“Estoy acá pidiendo justicia por mi hermano de 22 años, porque él no es ningún delincuente”, afirmó Bárbara Zerpa, hermana de Luis Eduardo Zerpa Betancourd.
Los familiares reiteraron su llamado a las autoridades internacionales para que exijan al gobierno de Bukele y a la administración de Donald Trump se garantice el debido proceso y se frene la criminalización de los migrantes venezolanos en el extranjero.
