El gobierno de República Dominicana, presidido por Luis Abinader, designó como organización terrorista al llamado «Cártel de los Soles«, pese a que la existencia de esta supuesta organización de militares venezolanos ha sido desmentida internacionalmente.
La designación fue publicada por la presidencia del país caribeño en el Decreto 500-25 y se «instruye para comunicar el contenido a los organismos internacionales competentes y a los socios estratégicos de República Dominicana».
El decreto también pone en alerta los «organismos de inteligencia y seguridad del Estado» para prevenir las incursiones del grupo en territorio dominicano o en contra de intereses dominicanos en el exterior.
El mito del Cártel de los soles
El ex secretario general adjunto de la ONU y exdirector ejecutivo de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), Pino Arlacchi, sostiene que, durante su gestión, constató que la cooperación de Venezuela contra el narcotráfico “era de las mejores de Sudamérica, comparable únicamente con la de Cuba”, y afirma: “Ni Venezuela ni Cuba han tenido jamás extensiones de tierra cultivadas con cocaína”.
En un artículo denominado “El Gran Engaño contra Venezuela: la geopolítica del petróleo disfrazada de lucha contra las drogas” califica como “calumnia con motivaciones geopolíticas” la narrativa de un supuesto “narcoestado” venezolano, relacionada según el autor, con intereses energéticos de Washington.
Uno de los ejes del documento es la desmitificación del llamado “Cartel de los Soles”, al que describe como una “ficción hollywoodense” que no aparece en informes de la ONU ni en documentos de agencias europeas.
Al respecto; InSight Crime —centro de investigación reconocido en crimen organizado— describe el llamado “Cartel de los Soles” no como un cartel jerárquico único, sino a lo sumo como individualidades fragmentadas de corrupción dentro de fuerzas de seguridad y actores políticos que podrían intentar facilitar el tráfico, una caracterización distinta a la de un “súper-cartel” centralizado.
Textualmente, sus análisis recientes advierten que las sanciones de EE.UU. “mal caracterizan” al grupo al presentarlo como una estructura piramidal e ideológica; más bien sería un sistema de corrupción con participación de funcionarios militares de baja jerarquía.