El gobierno neerlandés prohibió la entrada al país de Itamar Ben-Gvir, ministro de Seguridad Nacional, y Byezalel Smotrich, ministro de Finanzas, ambos del ala más extremista del Ejecutivo israelí.
Esta medidad fue comunicada por el ministro de Asuntos Exteriores de Países Bajos, Caspar Veldkamp, mediante una carta enviada al Parlamento neerlandés. De acuerdo a Veldkamp, esta decisión se fundamenta en la conducta de ambos ministros quienes abiertamente han incitado a la violencia de colonos contra la población palestina, así como de promover una «limpieza étnica» en Gaza.
En este sentido, el Ejecutivo neerlandés convocó al embajador de Israel, Modi Ephraim, para manifestarle su preocupación por la «insostenbile e injustificable» situación humanitaria en Gaza.
¿Quiénes son Ben-Gvir y Smotrich?
Itamar Ben-Gvir y Bezalel Smotrich lideran partidos nacionalistas de extrema derecha —Otzma Yehudit y Sionismo Religioso, respectivamente— y han sido claves en la consolidación de la coalición que sostiene al primer ministro Benjamín Netanyahu.
Son activos defensores de mantener la ofensiva militar en Gaza, proponen el reasentamiento israelí en ese territorio tras la guerra, y defienden lo que denominan “emigración voluntaria” de la población palestina.
Según Mundiario, Ben-Gvir, como responsable de la policía, ha sido señalado por no actuar contra los colonos que perpetran ataques contra palestinos en Cisjordania. Por su parte, Smotrich ostenta funciones sobre la administración civil del territorio ocupado, y ha promovido activamente la expansión de los asentamientos y la anexión de partes de la región.
Estas sanciones neerlandesas se suman a las ya impuestas por países como Eslovenia, Canadá, Australia, Reino Unido, Noruega y Nueva Zelanda.
Israel rechazó acción neerlandesa
El ministro de Asuntos Exteriores, Gideon Saar, convocó a la embajadora neerlandesa, Marriet Schuurman, para expresar una queja formal. En un comunicado, su oficina calificó la decisión de los Países Bajos como un “ataque contra el derecho de Israel a la autodefensa” y contra integrantes legítimos del gobierno democráticamente electo del país.
Por su parte, los ministros sancionados reaccionaron con un tono desafiante. Ben-Gvir aseguró que “seguirá trabajando” por Israel y defendió su postura de bloquear toda ayuda humanitaria a Gaza, al tiempo que exigió que Hamás libere a los rehenes israelíes. Smotrich acusó a los líderes europeos de “someterse a las mentiras del islam radical” y reafirmó su compromiso con la expansión israelí en los territorios ocupados.
En paralelo, el primer ministro neerlandés, Dick Schoof, ha sugerido que su Gobierno podría respaldar más medidas contra Israel si no se observa una mejora sustancial de la situación en Gaza. Entre esas medidas estaría incluso apoyar la suspensión de la participación israelí en programas europeos de investigación científica, una herramienta que Bruselas considera clave para ejercer presión diplomática.