Parte de la tripulación del buque de guerra estadounidense USS Gravely se reunió con el alto mando militar de Trinidad y Tobago.
Un comunicado de las Fuerzas de Defensa de Trinidad y Tobago, explica que “el lunes 27 de octubre de 2025, el comandante Gregory J Piorun Jr, oficial al mando del USS Gravely, realizó una visita de cortesía al capitán Don Polo, jefe del Estado Mayor de Defensa del TTDF en el cuartel general de las Fuerzas de Defensa, Chaguaramas.”
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El USS Gravely llegó al puerto de Puerto España el domingo 26 de octubre, supuestamente para cumplir con ejercicios conjuntos, por demás, anuncian que la 22a Unidad Expedicionaria de Marines de EE. UU. realizará formación conjunta con la Fuerza de Defensa de Trinidad y Tobago (TTDF) durante el mismo período.
“Los debates se centraron en la larga relación bilateral entre las dos organizaciones, el ejercicio actual de capacitación y los planes futuros para seguir colaborando en el fomento de la capacidad y el intercambio de expertos” reza el texto.
Según el comunicado, el comandante Piorun Jr. estaba acompañado por el capitán Gideon T. Teklegiorgis, oficial de enlace militar de los Estados Unidos y otros miembros del personal de la Embajada de los Estados Unidos, Puerto España. También estaba presente en la reunión el comandante Ray Frederick, oficial al mando interino del TTCG.
Trinidad y Tobago ¿Puerto de Estados Unidos?
La presencia del USS Gravely en el puerto de Puerto España incrementa tensiones regionales. Desde agosto, Estados Unidos mantiene desplegados en aguas regionales cerca de 10 000 efectivos más el grupo anfibio listo. El 10 de octubre, el Comando Sur anunció la creación de una Fuerza de Tarea Conjunta que operaría en la supuesta área de responsabilidad del Comando.
En este periodo, desde el 2 de septiembre, el ejército estadounidense ha ejecutado al menos 10 ataques que dejan ya un saldo de 43 personas muertas, entre ellas, dos trinitobaguenses.
Estas acciones emulan ejecuciones extrajudiciales, dado que violan los protocolos de detención en alta mar establecidos por Naciones Unidas y el propio convenio de este tipo exclusivo de la zona del Caribe y Estados Unidos, el Shiprider Agreement.
La presencia del Gravely incrementa entonces la amenaza hacia Venezuela, dado que aunque Estados Unidos justifica sus actividades bajo el pretexto de combatir el narcotráfico en la región, varias voces políticas apuntan a la intención de un cambio de régimen en Venezuela.
La nación bolivariana rechazó, vía comunicado, la presencia del buque en aguas de Trinidad y Tobago, considerándolo una afrenta a su estabilidad y a la cohesión regional.
“Al alinearse con la agenda militarista de Washington, Persad-Bissessar no solo busca atacar a Venezuela, un país que siempre ha mantenido una política de cooperación energética, respeto mutuo e integración caribeña, y romper nuestros lazos históricos de hermandad, sino que también viola la Carta de las Naciones Unidas, la Proclamación de América Latina y el Caribe como Zona de Paz aprobada por la CELAC y los principios de la CARICOM, que protegen a todos los pueblos del Caribe. No se trata de ejercicios defensivos: es una operación de agresión militar colonial destinada a convertir el Caribe en un espacio de violencia letal y dominación imperial estadounidense” reza el comunicado.
También en respuesta a estas provocaciones sostenidas desde su toma de posesión, la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez Gómez, quien además ejerce como ministra de hidrocarburos, solicitó al presidente Nicolás Maduro la denuncia de los tratados de cooperación en energía con Trinidad y Tobago. Con esta acción, también se suspenden las negociaciones del Trato gasífero Dragón.
