La India ha activado este lunes alertas en varios hospitales del país tras registrar un repunte de más de 1.000 casos activos de coronavirus, de los cuales 752 se detectaron en la última semana, según fuentes oficiales. Esta medida busca preparar al sistema de salud ante una posible nueva ola en las principales ciudades, especialmente en Nueva Delhi, donde se reportan más de 100 casos activos.
La jefa de Gobierno de Delhi, Rekha Gupta, aseguró que los hospitales cuentan con todas las instalaciones necesarias y que se ha emitido un aviso para mantener la vigilancia, aunque insistió en que no hay «ninguna situación de pánico».
Los estados más afectados actualmente son Kerala, en el sur, con 335 nuevos casos, y Maharashtra, en el oeste, con 153, sumando más de 600 casos activos, entre ambos.
Esta alerta preventiva recuerda la dramática segunda ola de COVID-19 en 2021, cuando India sufrió un colapso sanitario con más de 400.000 contagios y 4.000 muertes diarias. Hasta la fecha, el país acumula más de 45 millones de casos y 533.673 muertes oficiales, aunque la Organización Mundial de la Salud estima que el número real de fallecidos podría ser mucho mayor, alrededor de 4,7 millones.