El ministro de Exteriores de Irán, Abás Araqchí, solicitó este lunes a EEUU una solución negociada a su programa nuclear y se mostró abierto a inspecciones a sus instalaciones, pero no a abandonar su «derecho» al enriquecimiento de uranio.
«Mi mensaje para EEUU es: busquemos una solución negociada para el programa nuclear de Irán. Ya lo hicimos en el pasado, en 2015», dijo en una entrevista concedida a la cadena Fox News.
Su intervención tuvo lugar el mismo día en que Irán anunció que el viernes mantendrá conversaciones en Estambul con los países del E3 (Francia, Alemania y Reino Unido) sobre su programa nuclear, en medio de las tensiones sobre la posible restauración de las sanciones internacionales contra Teherán.
Además, Irán, China y Rusia debaten este martes 22 de julio sobre las actividades nucleares de Teherán y las sanciones, mientras que los países del E3 mantendrán conversaciones el viernes en medio de amenazas de reimponer sanciones.
Irán ha mantenido este año cuatro rondas de conversaciones con el E3, de forma independiente a las negociaciones con Estados Unidos, con el que también ha entablado cinco rondas de diálogo sin lograr progresos debido a las divergencias sobre el enriquecimiento de uranio por parte de Teherán.
Las tres potencias europeas, junto con China y Rusia, son las partes restantes de un acuerdo nuclear de 2015 que levantó las sanciones a Irán a cambio de restricciones a su programa nuclear. El acuerdo se rompió en 2018, cuando Donald Trump, se retiró del mismo y comenzó a reimponer sanciones.
Irán dispuesto a negociaciones indirectas
«Si el objetivo es asegurar que Irán nunca tenga armas nucleares, es alcanzable. Pero si es privar a Irán de sus derechos, incluido el derecho al enriquecimiento, tenemos dificultades. El enriquecimiento está detenido porque nuestras instalaciones han sido atacadas, pero cualquier acuerdo sobre el programa nuclear iraní debería incluir el enriquecimiento en el futuro, porque es nuestro derecho», sostuvo Araqchí.
El jefe de la diplomacia iraní aseguró que su país está abierto a la negociación, pero no a un diálogo directo.
«Estamos dispuestos a tomar cualquier medida de fomento de la confianza necesaria para demostrar que el programa nuclear iraní es pacífico, que lo seguirá siendo y que Irán nunca recurrirá a armas nucleares. A cambio, esperamos que levanten sus sanciones. Es una situación en la que todos ganan. (…) No podemos iniciar estas negociaciones directamente. Seguimos prefiriendo las negociaciones indirectas», dijo.
Araqchí se mostró abierto igualmente a la cooperación con el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).
Con información de EFE y La Jornada