La niña de 11 años, acostumbraba a acompañar a su hermano mayor, Mohamed Hamad, quien se desempeñaba como el trabajador humanitario, a realizar entregas de alimentos, ropa y juguetes, a las familias desplazadas, demostrando coraje y resiliencia en medio del genocidio israelí.
Asimismo, mantenía una estrecha relación con Ouena Collective, una organización sin fines de lucro con sede en Gaza que proporciona ayuda humanitaria. Sus redes sociales se colmaron de videos y fotos en las que mostraba su participación en actividades benéficas, como distribuir ayuda humanitaria, cocinar para otros a pesar de la escasez y brindar diversas formas de apoyo para concienciar sobre la crisis humanitaria en Gaza.
Tras su muerte, usuarios en las redes sociales le rindieron homenajes, viéndola como un símbolo de luz en los momentos más oscuros de Gaza.
Yaqin forma parte de los más de 16.000 niños asesinados por el Ejército israelí desde el inicio de su guerra genocida el 7 de octubre de 2023, lo que equivale a un promedio de un menor muerto cada 40 minutos, de acuerdo a un informe del Ministerio de Salud en el enclave.
Este se suma a otro caso de genocidio infantil, registrado el viernes 23 de mayo en Gaza, cuando las fuerzas israelíes mataron a nueve niños en un ataque aéreo contra su lugar de residencia en la ciudad de Jan Yunis, ubicada en la parte suroccidental de la Franja de Gaza.
El ataque golpeó la casa de la madre de los infantes, Alaa Al-Najjar, pediatra del Hospital Nasser de la ciudad sureña, prendiéndole fuego y acabando con la vida de nueve de sus diez hijos, según informó el jefe del departamento de pediatría del hospital, Ahmad al-Farra.
Ejército israelí, justificó su acción genocida en que los menores eran vistos como supuestos «sospechosos» cerca de sus fuerzas, en lo que denominó una «zona de combate».
La Oficina de Prensa del Gobierno de Gaza, denunció este hecho reiterando que «los supuestos sospechosos no eran combatientes. Eran niños. Eran los hijos e hijas de dos médicos«.
Por otro lado, el esposo de la pediatra, el Dr. Hamdi Al-Najjar, se encuentra en estado crítico. Solo su hijo menor, Adam, sobrevivió, pero está herido.
La relatora especial de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los territorios palestinos, Francesca Albanese, criticó el ataque a la casa de al-Najjar como parte de un “patrón sádico” de una “nueva fase de genocidio” que enfrentan los palestinos en el enclave asediado.