Una decisión de Israel que ha estremecido el orden diplomático global fue tomada anoche cuando el Gabinete de Seguridad de validó el un plan para tomar el control militar completo de la Franja de Gaza, incluyendo la ciudad de Gaza.
El primer ministro, Benjamin Netanyahu, afirmó ante Fox News que esta iniciativa tiene por objetivo derrotar a Hamás y establecer una zona de seguridad, sin intención de mantener el control a largo plazo, anticipando una eventual transferencia de poder a fuerzas árabes no vinculadas con Hamás.
Condena global e impacto humanitario
La comunidad internacional respondió con rotunda condena.
- Hamás calificó el plan como un “nuevo crimen de guerra”.
- Alemania suspendió inmediatamente las exportaciones de armas que pudieran ser utilizadas en Gaza, dejando claro que, aunque reconoce el derecho de Israel a la autodefensa, “preocupa la escalada militar y la situación humanitaria” y pide liberar rehenes y permitir la entrada de ayuda humanitaria.
Países como España, Reino Unido, Turquía, China, Australia y Finlandia han expresado su oposición, exigiendo un cese del fuego urgente y garantizando el acceso de asistencia humanitaria. Mientas que Organizaciones como la ONU y la Media Luna Roja advirtieron sobre el agravamiento de la crisis humanitaria y posibles violaciones al derecho internacional.
El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, declaró recientemente (día 5 de agosto cuando se conoció que se daría esa discusión) que rechaza “de plano” cualquier anexión ilegal de Gaza y Cisjordania por parte de Israel, calificando estas acciones como graves violaciones del Derecho Internacional.
Añadió que España, junto con la Unión Europea, “nunca reconocerá una anexión ilegal” y afirmó que “Europa ha hecho demasiado poco, demasiado tarde”.
Turquía exige acción internacional
Turquía, que ya había suspendido todo comercio con Israel y catalogado la campaña como genocidio, intensificó su presión diplomática. El ministro de Exteriores turco, Hakan Fidan, viajó a Egipto para tratar con el presidente Abdel Fattah al-Sisi la situación humanitaria y para exigir a Israel el fin de acciones que amenazan la paz y la solución de dos Estados. Instó a las potencias mundiales y a la ONU a intervenir.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, advirtió sobre un agravamiento del sufrimiento humano y la comisión de posibles crímenes atrozes. Organismos internacionales y Estados miembros de la UE refuerzan su condena global.
Eco dentro de Israel
Dentro del país, la medida ha generado fuerte rechazo. El líder de la oposición, Yair Lapid, calificó la decisión como un “desastre”, mientras que los familiares de los rehenes advirtieron que la operación podría significar una “sentencia de muerte” para sus seres queridos. Incluso el jefe del Estado Mayor del ejército israelí alertó sobre los riesgos para los rehenes y las consecuencias humanitarias de mantener esta escalada militar.
La aprobación del plan para ocupar Gaza por parte del Gabinete de Seguridad ha desatado una reacción unánime: gobiernos, organizaciones internacionales, aliados tradicionales y voces críticas dentro de Israel denuncian el avance como legalmente cuestionable y humanitariamente peligroso. El panorama diplomático se complejiza, en tanto crecen las voces que exigen diálogo, alivio humanitario y un retorno urgente a la solución de dos Estados.
