La actriz estadounidense Amanda Seyfried reavivó el debate político y social en Estados Unidos tras afirmar que el socialismo es “una idea maravillosa”, durante una entrevista concedida a la revista Variety.
Sus declaraciones se produjeron en el contexto de la promoción del drama musical El testimonio de Ann Lee, una producción centrada en la figura histórica de la fundadora del movimiento religioso Shaker, caracterizado por la vida comunal y la igualdad social.
En la entrevista, Seyfried estableció un paralelismo entre las enseñanzas de Ann Lee, quien lideró a los Shakers en el siglo XVIII, y los desafíos contemporáneos de la sociedad estadounidense. “Gracias a Dios que hablamos tanto de Ann Lee, porque hay una relación directa entre lo que ella creó y lo que nos falta”, afirmó la actriz, aludiendo a la pérdida de cohesión social y solidaridad en la actualidad.
Para Seyfried, el eje central de esa filosofía no es ideológico sino humano. “¿Qué tal si no tenemos ningún orden del día? ¿Y si nuestro orden del día es cuidarnos unos a otros?”, planteó, sugiriendo una visión de comunidad basada en la empatía y el apoyo mutuo, más allá de etiquetas políticas tradicionales.
Fue en ese marco donde la actriz expresó de forma explícita su postura sobre el socialismo. “El socialismo es una idea maravillosa, y sé que no funciona a la perfección, ni que la gente entiende su verdadero significado”, sostuvo.
En su interpretación, el concepto se traduce en una ética de responsabilidad compartida: “Para mí, se trata de cuidarnos unos a otros. Si tengo más dinero, puedo gastar más en los demás”, explicó.
Las declaraciones de Seyfried se producen en un momento en que el debate sobre los modelos económicos gana fuerza en Estados Unidos, en medio de encuestas que reflejan una caída histórica en la aprobación del capitalismo, especialmente entre las generaciones más jóvenes.
En ese contexto, las palabras de la actriz se suman a una tendencia creciente de figuras públicas que cuestionan el sistema económico dominante y abogan por formas alternativas de organización social.
Durante la conversación, la intérprete también recurrió a ejemplos históricos y contemporáneos para reforzar su argumento. Comparó el espíritu comunitario de los Shakers con la respuesta colectiva observada tras los atentados del 11 de septiembre de 2001.
“Todos lo dejaron todo por los demás. Sacrificaron sus vidas sin pensarlo dos veces”, señaló. Sin embargo, lamentó que ese nivel de solidaridad solo emerja en situaciones extremas. “No deberíamos tener que pasar por un meteorito o una casa en llamas para dejarlo todo por los demás”, añadió.
En la parte final de la entrevista, Seyfried reflexionó sobre las motivaciones humanas y las contradicciones sociales. “Todos queremos ser vistos, todos queremos ser amados, todos queremos ser deseados.
Todos queremos triunfar. Todos amamos el dinero. Todos amamos a nuestros hijos”, enumeró, subrayando que estos impulsos atraviesan a todos los sectores ideológicos. Frente a ello, cuestionó el papel de la ambición individual: “¿Qué es la avaricia? ¿Cómo te ayuda la avaricia? ¿Cómo te ayuda la actitud defensiva? ¿Cómo nos perjudica el ego?”, concluyó.
