Según los pronósticos del Fondo Monetario Internacional (FMI), para este año 2025, la Economía de Kenia superará la de Etiopía, que ha venido liderando el PIB en África Oriental en los últimos años.
Sin embargo, luego de que Etiopía liberara su sistema cambiario en julio del año pasado, el birr su moneda, se devaluó más del 55% frente al dólar. Lo que condujo a que la nación del Cuerno de África pidiera un préstamo de 16.600 millones de dólares al Banco Mundial y 3400 millones al FMI, endeudando su economía.
En contraparte, el chelín la moneda keniana se fortaleció en un 21% el año pasado, convirtiéndose en la moneda de mejor desempeño del mundo. Pero el chelin keniano, continúo creciendo su valor gracia a un bono de 1.500 millones de dólares, que obtuvo en febrero, ayudando que aumentaras sus reservas.
El FMI estimó que el PIB de Kenia será de 132.000 millones de dólares en 2025, superior a los 117.000 millones de dólares de Etiopía. Sumado a esto, según datos del Tesoro de Kenia, los ingresos de exportación durante los últimos años han contribuido a esa bonanza financiera y la inversión industrial de china en el país africano la catapultó a abrir sus lazos comerciales con el continente asiático.

Pero no podemos obviar que gran parte del crecimiento económico en Kenia, ha sido gracia a reformas financieras internas para mejorar el entorno empresarial y comercial, en lo que se destaca la modernización de varias leyes, como, por ejemplo, la ley de Zonas Económicas Especiales, la ley sobre Sociedades e insolvencia, la ley del Servicio de Registro Empresarial.
Los productores kenianos, han reconocido que gracias a las zonas económicas especiales se logró aperturar el comercio y se ha mejorado la orientación exportadora de las empresas kenianas. Al mismo tiempo la industrialización y la manufactura orientada a la exportación han sido componente para consolidar el plan de desarrollo económico, que tiene como objetivo crear parques industriales a lo largo de corredores de infraestructura en apoyo a los sectores textiles, mineros y de agroprocesamiento.

La innovación digital en Kenia, por medio del dinero Digital Móvil que gracia a la tecnología financiera, ha sido un factor de cambio y desarrollo, ha permitido el impulso de la inclusión financiera y del emprendimiento. Además, las continuas inversiones en energía renovable, refuerzan sus perspectivas económicas.
Se pronostica que entre el 2025 y 2035, la región de África Oriental registre un crecimiento económico más rápido que el África subsahariana. Pero, además, será la región económica de mayor crecimiento a nivel mundial ya que se prevé que alcance una tasa de crecimiento anual compuesto del PIB del 6,1 % en términos reales, superando a otros mercados emergentes como América Latina y el Sudeste Asiático. Lo que hace que Kenia se posicione geoestratégicamente como un centro comercial del África Oriental.