Una de las principales ciudades de la región de Darfur, la ciudad de Al-Fashir, fue capturada por las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) y su comandante el general Mohammad Hamdan Daglo, que lleva más de dos años en guerra contra el ejército de sudan, según medio regionales, el jefe del ejército sudanés, el general Abdel-Fattah Burhan, afirmó que sus tropas se retiraron de Darfur debido a “la destrucción sistemática y el asesinato sistemático de civiles por parte de las FAR”.
El martes 28 de octubre, autoridades locales denunciaron que más de 2000 personas han sido asesinadas durante la ofensiva de la FAR entre el domingo y el lunes pasado en la ciudad de Al-Fashir, además, el gobernador de Darfur, designado por el Gobierno de Sudán, Mini Arko Minawi, denunció que se trató de un «genocidio» por parte de las FAR.
Los principales objetivos de las FAR serían grupos no árabes, entre ellos los pueblos Fur, Zaghawa y Masalit, Vídeos en redes sociales muestran detenciones masivas y asesinatos brutales mientras la gente intenta huir de la ciudad a pie.
Según los informes, de la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en Sudán, Jacqueline Wilma Parlevliet, más de 25.000 personas lograron escapar de Al-Fashir en los últimos días, viajando principalmente a Tawila, una ciudad ubicada a unos 60 kilómetros al oeste de la ciudad de Al-Fashir.
Se han reportado desplazamientos adicionales en todo Darfur del Norte, y se espera que más personas huyan en los próximos días, incluso cruzando la frontera hacia Chad, donde ACNUR y sus socios están preparados para asistir a los desplazados.

Según la ONU, desde el 2023, 1.8 millones de personas han salido de Sudan hacia países vecinos como República Centroafricana, Chad, Egipto, Etiopía y Sudán del Sur, también las naciones unidas ha reportado que más de 2,9 millones de niños y niñas en Sudán sufren malnutrición aguda.
La Red de Médicos de Sudán, informó que los combatientes de FAR secuestraron cuatro médicos, un farmacéutico y una enfermera en Darfur. También, el marte 28 de octubre la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR) indicó que cinco voluntarios de la organización fueron asesinados también en Bara ciudad ubicada en el estado de Kordofán, mientras distribuían alimentos.
La guerra interna en Sudan inició en abril del 2023 y unas 40.000 personas ha muerto por los combates, según reportes de la ONU. Sin embargo, analistas internacionales señalan que hay intereses más profundos dentro del conflicto que no solamente es político sino económico, la región de Darfur, es una región rica en oro y minerales estratégicos, como las tierras raras, lo que la hace apetecible a intereses extranjeros.
La FAR ha extendido su dominio sobre las minas de oro y redes de contrabando y parte del oro que extraen se vende de manera irregular hacia los Emiratos Árabes Unidos, uno de los principales centros globales del comercio aurífero de Asia Occidental, aspecto que permite ver como esta nación del medio oriente es uno de los actores externos que interviene en los asuntos internos de Sudan por el interés aurífero.

 
                                    