Un soldado del ejército israelí, perteneciente a la brigada de infantería Givati, reveló que las fuerzas desplegadas en el norte de Gaza operan bajo instrucciones explícitas de destruir zonas residenciales para hacer imposible el retorno de los palestinos expulsados durante la guerra.
“La misión es derribarlo todo. Simplemente derribar todo lo que hay. Para que no quede nada”, declaró el militar en una entrevista, solicitando el anonimato por motivos de seguridad. “Cuando necesitas desmantelar un lugar, es para que los árabes no regresen”, agregó.
La estrategia, afirma el soldado israelí, consiste en evacuar toda la zona norte de la Franja de Gaza, bloquear el acceso a ayuda humanitaria y ocupar el territorio. La privación intencional de alimentos, agua potable y medicinas fue utilizada como herramienta para forzar el éxodo de la población civil.
Durante los primeros meses del plan, implementado entre octubre de 2024 y enero de 2025, más de medio millón de palestinos fueron desplazados del norte de Gaza. La brigada Givati no solo participó activamente en estas operaciones, sino que además fue señalada por el incendio intencional de escuelas y la destrucción casi total de localidades como Beit Hanun, Yabaliya y Rafah.
Organizaciones de derechos humanos y expertos en derecho internacional han denunciado que estas acciones constituyen violaciones graves al IV Convenio de Ginebra, al tratarse de desplazamientos forzados de población civil y destrucción de infraestructura esencial sin justificación militar proporcional.
Un genocidio documentado
La ofensiva militar sobre Gaza, iniciada en octubre de 2023, ha dejado hasta la fecha un saldo devastador:
- 54.772 palestinos asesinados
- 125.834 heridos
- Cientos de miles desplazados
- La mayoría de las víctimas son mujeres y niños.
En los últimos dos días, hospitales en Gaza reportaron 95 nuevos fallecimientos y más de 300 heridos. Según el Ministerio de Salud del enclave, al menos 110 personas han muerto en puntos de distribución de ayuda humanitaria, blanco recurrente de ataques israelíes.
A esto se suma la reciente ofensiva conocida como Tanques de Gedeón, lanzada en mayo de 2025, que incluye órdenes masivas de evacuación y nuevas incursiones en áreas densamente pobladas.
Israel ha sido acusado reiteradamente de violar el derecho internacional humanitario al atacar infraestructura civil, bloquear la entrada de suministros esenciales y perpetrar masacres contra la población civil.
Mientras tanto, crecen las voces que exigen una investigación internacional independiente y sanciones contra los responsables de lo que ya muchos califican como un genocidio en curso.
