El presidente Nicolás Maduro afirmó que, de acuerdo con la encuestadora internacional Data Viva, el 89% de los venezolanos rechaza a la dirigente de extrema derecha María Corina Machado (MCM), tras sus recientes declaraciones en las que vinculó a la población venezolana con el narcotráfico.
Durante su intervención, Maduro señaló que más de 300 movilizaciones nocturnas se desarrollaban en todo el país como respuesta popular ante lo que calificó como agresiones externas y llamados a la intervención militar contra Venezuela.
El mandatario calificó de “gravísimas” las afirmaciones de MCM y sostuvo que buscan criminalizar al pueblo venezolano y justificar acciones de fuerza. En ese contexto, subrayó que el rechazo reflejado por Data Viva es amplio y transversal, sin distinción de ideologías ni posiciones políticas.
«Lo que tiene roto es el cerebro»: Maduro sobre supuesta fractura de MCM
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, respondió este lunes a las declaraciones de la dirigente de extrema derecha María Corina Machado (MCM), a quien acusó de promover una narrativa de criminalización contra el pueblo venezolano y de respaldar llamados a una intervención militar extranjera.
Durante una actividad pública en Caracas, Maduro hizo referencia a versiones difundidas sobre una supuesta fractura sufrida por Machado y afirmó que el problema no es físico, sino político y moral. En ese contexto, calificó como “gravísimas” sus recientes declaraciones desde el exterior, en las que aseguró que el 60% de la población venezolana estaría vinculada al narcotráfico.
La vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez también respondió a recientes declaraciones de la dirigente de extrema derecha, María Corina Machado (MCM), quien desde un foro en Noruega vinculó a una parte mayoritaria de la población venezolana con redes de narcotráfico y actores armados extranjeros.
A través de un mensaje en su canal de Telegram, Rodríguez calificó las afirmaciones como infundadas y ofensivas, y señaló que reproducen estigmas que han sido utilizados históricamente para justificar presiones externas contra Venezuela.
Subrayó que acusar sin pruebas a millones de ciudadanos no solo distorsiona la realidad del país, sino que refuerza narrativas criminalizadoras promovidas fuera de sus fronteras.
