En la mañana del viernes 6 de junio de 2025, decenas de manifestantes antigubernamentales en Lome, capital de Togo, fueron dispersados con gases lacrimógenos y perdigones cerca del palacio presidencial.
El frente “No toquen mi constitución”, una agrupación compuesta por diferentes partidos políticos de oposición, condenaron las detenciones arbitrarias llevadas a cabo los días 5 y 6 de junio durante las manifestaciones dispersadas por la policía.
Según medios locales, la mitad de los 80 manifestantes detenidos fueron liberados el lunes 9 de junio por la noche. Sin embargo, informó una organización local de derechos humanos que al menos 25 manifestantes permanecen detenidos.
En medio de los acontecimientos, el frente de oposición, “No toquen mi constitución”, publicó una lista de siete personas detenidas, entre ellos un médico, cuyo arresto también fue condenado por el consejo médico nacional.

El fiscal Talaka Mawama defendió las detenciones y describió las protestas como “parte de una revuelta contra las instituciones de la república”.
Durante la noche del jueves a la mañana del viernes, los manifestantes protestaron contra el aumento del precio de la electricidad y la reforma constitucional.
En una declaración del sábado, la coalición opositora «Dinámica para la mayoría de la gente» (DMP), dijo que los cambios constitucionales eran una maniobra política para permitir que el presidente extendiera su mandato.

La reforma constitucional
Los legisladores de Togo aprobaron en abril una reforma a la constitución relacionados con los límites del mandato presidencial y el modo en que se eligen los presidentes.
El parlamento de Togo ya había adoptado las reformas el 25 de marzo, pero la reacción negativa de la oposición condujo a que el presidente Faure Gnassingbe pidiera una segunda votación parlamentaria y los legisladores dieron la aprobación final a mediados de Abril.
La reforma constitucional fue aprobada con 87 votos a favor del nuevo sistema político, donde el presidente ya no será elegido por sufragio universal, sino por los miembros del parlamento.
Al mismo tiempo, la diputada del partido gobernante, koumealo anate, declaro a favor de la reforma “Togo acaba de dar un nuevo paso hacia una democracia más inclusiva y participativa. esto es una satisfacción y un orgullo para nosotros”.
¿Qué intereses tienen las reformas constitucionales en algunos países de África?
Diversos países africanos, entre ellos la República Centroafricana, Ruanda, la República del Congo, Costa de Marfil y Guinea, han impulsado en los últimos años cambios constitucionales y otros cambios legales que permiten a los presidentes extender sus mandatos en el cargo.
Quienes se oponen a los cambios políticos en Togo, temen que la reforma constitucional permita nuevas prórrogas del mandato de presidente Faure Gnassingbe, y que este 2025 sea relecto indefinidamente.
No obstante, analistas políticos han informado que el predecesor a la presidencia de Togo, era el padre del actual presidente, conocido como Gnassingbé Eyadema, quien tomó el poder por la fuerza en 1967, además les preocupa que se mantenga una dinastía disfrazada, ahora amparada por el parlamento, quien apoya al gobierno que ya tiene 20 años en el poder.