En México, lo que comenzó como una protesta pacífica convocada por la Generación Z terminó este sábado con enfrentamientos, gases lacrimógenos y vallas derribadas a pocos metros de Palacio Nacional, sede del Poder Ejecutivo mexicano.
La movilización, originalmente impulsada por jóvenes para demandar mayor seguridad ciudadana al gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, tornó violenta luego de que grupos de la derecha y encapuchados generaran disturbios. La policía federal, resguardando el acceso al palacio, utilizó gases lacrimógenos para contener a manifestantes que golpearon las vallas de seguridad con martillos y piedras, en un intento por ingresar al recinto.
México: Zócalo de la protesta pacífica a la violencia
Durante casi una hora, un grupo vestido de negro y con el rostro cubierto se ensañó contra el perímetro de metal. Lograron tumbar varias vallas de tres metros de altura antes de que refuerzos policiales los repelieran. Desde dentro de la manifestación, otros participantes gritaban: “¡Fuera encapuchados!”, “¡No me representas!”.
En paralelo, avanzaron dos columnas con demandas distintas. La marcha de la Generación Z, que aunque dominada por jóvenes, congregó a personas de todas las edades, en una petición intergeneracional por más seguridad.
También se sumó a la demostración el “bloque del Sombrero”, vinculado a Carlos Manzo, exalcalde de Uruapan, Michoacán, asesinado el 1 de noviembre. Sus consignas reclamaban justicia: “Carlos Manzo, héroe de México” y “Sombrerazos sí, abrazos no.”
Las protestas, replicadas en otras ciudades del país, reflejan un reclamo claro: no olvidar a las víctimas de la violencia. Sin embargo, algunos manifestantes desataron la violencia al agredir físicamente a un policía, lo tiraron al suelo y lo golpearon brutalmente durante la protesta.
En uno de los videos que fueron grabados en la zona se puede observar cómo los manifestantes lanzan diversos objetos hacia los uniformados y los golpean. Tras derribar al policía, los manifestantes lo rodearon y empezaron a golpearlo y patearlo mientras este trataba de levantarse.
«Durante muchas horas, esta movilización se desarrolló pacíficamente, hasta que un grupo de individuos encapuchados comenzó a cometer actos violentos», afirmó Pablo Vázquez, jefe de seguridad de la Ciudad de México.

Vázquez informó de que 100 agentes de policía resultaron heridos, 40 de los cuales necesitaron atención hospitalaria por contusiones y cortes, mientras que 20 manifestantes resultaron heridos.
También hubo informes de disturbios en la segunda ciudad más grande de México, Guadalajara, donde 47 personas fueron detenidas y 13 resultaron heridas, entre ellas tres agentes de policía, según las autoridades.
Sheinbaum, que lleva en el poder desde octubre de 2024, mantiene índices de aprobación superiores al 70 %, pero ha sido objeto de críticas por su política de seguridad tras varios asesinatos de gran repercusión.
En los días previos a la protesta del sábado, Sheinbaum acusó a los partidos de derecha de intentar infiltrarse en el movimiento de la generación Z y de utilizar bots en las redes sociales para intentar aumentar la asistencia.

