Movimientos progresistas de Estados Unidos reeditan las protestas “No Kings” o “Sin Reyes”, contra la administración de Donald Trump.
Líderes de la coalición de organizaciones pronostican que las demostraciones tomarán 2500 localidades de todo Estados Unidos, desde pequeños pueblos hasta grandes ciudades, para manifestarse en contra de la administración Trump. Se trata de un modelo distribuido en el que la gente protesta en sus propias comunidades en lugar de desplazarse a los grandes centros urbanos para demostrar que el descontento con Trump existe en todos los rincones de Estados Unidos.
“Nacido en las calles, gritado por millones, llevado en pancartas y cánticos, resuena desde los bloques de edificios hasta las plazas rurales, uniendo a la gente de todo el país para luchar juntos contra la dictadura” reza el slogan de la protesta en su sitio web.
Para la jornada de acción de este 18 de octubre, los organizadores han identificado varias ciudades clave: Washington D. C.; San Francisco; San Diego; Atlanta; Nueva York; Houston, Texas; Honolulu; Boston; Kansas City, Misuri; Bozeman, Montana; Chicago y Nueva Orleans.
Protestas No Kings, sus razones
La coalición No Kings, que describe como pro democrático y pro trabajadores, rechaza las políticas de autoritarismo de Donald Trump, citando sus “crecientes excesos autoritarios y la corrupción” como motivo de las protestas, entre los que se incluyen el aumento de las deportaciones, el recorte de la asistencia sanitaria, la manipulación de los mapas electorales, entre otras políticas.
La coalición destaca lo que considera varias preocupaciones importantes sobre la segunda administración Trump: su uso del dinero de los contribuyentes para hacerse con el poder, enviando fuerzas federales para tomar el control de ciudades estadounidenses; Trump ha dicho que quiere un tercer mandato y «ya está actuando como un monarca»; el desafío a los tribunales y recorte de servicios, al tiempo que deporta a personas sin el debido proceso.
No Kings, segunda edición
La primera jornada de las protestas No Kings ocurrió el 14 de junio. El Consorcio de Recuento de Multitudes de Harvard, que utiliza datos disponibles públicamente para estimar el tamaño de las multitudes políticas, afirmó que el evento de junio fue “probablemente la segunda manifestación más grande en un solo día desde que Donald Trump asumió el cargo en enero de 2017”, solo superada por la Marcha de las Mujeres de 2017.
Según otras firmas rastreadoras de datos, la marcha convocó entre 4 y 6 millones de personas en junio. Trump, así como gobernadores de estados republicanos, han anunciado el despliegue de la Guardia Nacional en el contexto de la protesta.

Tomaron parte en estas demostraciones el grupo Indivisible, la organización del movimiento progresista con sedes en todo Estados Unidos y que es uno de los principales organizadores. La Unión Americana por las Libertades Civiles es uno de los socios, al igual que el grupo de defensa Public Citizen. Sindicatos como la Federación Americana de Profesores y SEIU forman parte de la coalición. El nuevo movimiento de protesta 50501, que comenzó a principios de este año como una convocatoria de protestas en los 50 estados en un solo día, es otro de los socios. Otros son Human Rights Campaign, MoveOn, United We Dream, League of Conservation Voters, Common Defense y otros.
Home of the Brave, un grupo afiliado al crítico de Trump George Conway que se describe a sí mismo como una «comunidad de estadounidenses que se niegan a ser silenciados», anunció una campaña publicitaria de un millón de dólares para promover las manifestaciones en esta edición.

Otra peculiaridad es la solidaridad en Europa y otras partes del mundo con esta segunda gran protesta. En Berlín, Alemania; Madrid, España y en Roma, Italia, cientos de personas acompañan la movilización.