El cardenal estadounidense Timothy Dolan, considerado favorito de Donald Trump para ser elegido el próximo Papa, cree que la imagen del presidente estadounidense vestido de papa «no ha estado bien», según consideró este domingo en Roma, a tres días de que comience el cónclave para elegir nuevo pontífice.
La imagen, que fue compartida por las cuentas oficiales de redes sociales de la Casa Blanca, se publica mientras los católicos lloran la muerte de Francisco.
La Conferencia Católica del estado de Nueva York acusó a Trump de burlarse de la fe católica. La publicación llega días después de que él bromeara con los periodistas diciendo: «Me gustaría ser Papa».
Trump también ha dicho que le gustaría que el arzobispo de Nueva York, el cardenal Timothy Michael Dolan, uno de los prelados estadounidenses presentes en el cónclave, fuera el próximo papa.
«Debo decir que hay un cardenal de un lugar llamado Nueva York que es muy bueno. Veremos qué pasa».
Estados Unidos tendrá a diez cardenales representados en el cónclave y Dolan ya estuvo presente en el de 2013, en el que fue elegido como nuevo papa el cardenal argentino Jorge Bergoglio.
Dolan recibió dos votos en 2013 y en este nuevo cónclave estará de nuevo presente hasta que el misterio del nuevo pontífice se resuelva con el humo blanco.
Otros de los cardenales estadounidenses mencionados son Raymond Burke, considerado uno de los favoritos en el ámbito más conservador, y Robert Prevost, nombrado por Francisco prefecto del Dicasterio de los Obispos y presidente de la Comisión Pontificia para Latinoamérica y un fluido hispanohablante.