El secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, anunció este domingo el envío de 10 nuevos migrantes a El Salvador, señalados de supuestamente pertenecer al extinto Tren de Aragua.
“Anoche llegaron a El Salvador otros 10 delincuentes de las organizaciones terroristas extranjeras MS-13 y Tren de Aragua”, escribió Rubio en su cuenta de X, celebrando lo que denominó como un logro de la “alianza entre Trump y Bukele”.
Este nuevo secuestro se suma a los más de 238 venezolanos llevados anteriormente a la cárcel de máxima seguridad CECOT, en condiciones que han sido denunciadas como violatorias de derechos humanos.
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El gobierno venezolano ha calificado estas acciones como una política de secuestros sistemáticos y detenciones arbitrarias promovida por EE.UU. y ejecutada por el gobierno de El Salvador.
El presidente Nicolás Maduro ha denunciado que están incomunicados, sin acceso a abogados ni visitas, y en condiciones que violan tratados internacionales. “Están desaparecidos, no hay proceso judicial, son crímenes de lesa humanidad”, expresó esta semana.
El gobierno venezolano ha reiterado que el Tren de Aragua está desmantelado y que estas acusaciones son infundadas. Familiares y movimientos sociales han exigido la liberación inmediata de los detenidos, denunciando una campaña de criminalización masiva y arbitraria contra migrantes venezolanos.
