Un fuerte operativo policial se desplegó la tarde del domingo en la Universidad de Carolina del Sur, en Columbia, tras reportes de un posible tiroteo dentro de las instalaciones.
La alarma se encendió cuando testigos aseguraron haber visto a un hombre blanco, vestido con pantalones negros, dentro de la biblioteca Thomas Cooper. Ante el aviso, las autoridades ordenaron a los estudiantes desalojar o atrincherarse en lugares seguros, mientras la Policía y los bomberos acudían al campus.
Videos difundidos en redes sociales mostraron escenas de caos: jóvenes corriendo, patrullas rodeando el área y mensajes de alerta advirtiendo sobre un “tirador activo”.
Sin embargo, poco después la propia universidad aclaró en un comunicado que “no hay evidencia de un tirador activo en este momento”. En una actualización, reiteró que “no hay ninguna emergencia en curso en este momento”, aunque confirmó que la biblioteca permaneció cerrada como medida de precaución.
A pesar de la desactivación de la alerta, la Policía continúa la búsqueda del sospechoso reportado, mientras la comunidad estudiantil trata de recuperar la calma tras varias horas de incertidumbre.
Por ahora, no se ha confirmado si se realizaron disparos ni se reportan víctimas.