La esperada reunión entre los presidentes de Rusia y Estados Unidos, Vladímir Putin y Donald Trump, ya está en preparación y podría concretarse la próxima semana, en un momento crítico del conflicto en Ucrania. Moscú y Washington confirmaron que los preparativos están en marcha y que ya se ha acordado el lugar del encuentro, aunque no ha sido revelado públicamente.
Kiril Dmítriev, enviado especial de la Presidencia rusa para la cooperación económica internacional, expresó optimismo sobre el potencial del encuentro:
«Rusia confirma que la cumbre Putin-Trump puede ocurrir la próxima semana y que los preparativos de la cumbre están en curso. Esta puede ser una reunión histórica. El diálogo prevalecerá», escribió en su cuenta en X.
El asesor presidencial ruso, Yuri Ushakov, también confirmó que el encuentro fue acordado «a propuesta de la parte estadounidense» y tendrá lugar «en los próximos días». Agregó que ya se definió «el lugar de celebración», del cual se informará más adelante.
¿Putin, Trump y Zelenski en la misma mesa?

Respecto a la posibilidad de una cumbre trilateral que incluya al líder ucraniano Vladímir Zelenski, Ushakov aclaró que «esta opción fue solo mencionada por el representante estadounidense durante la reunión en el Kremlin», pero que «no se discutió específicamente» y «la parte rusa dejó esta opción sin ningún comentario». Añadió:
«Proponemos, ante todo, centrar la atención en la preparación de la reunión bilateral con Trump y consideramos fundamental que esta reunión sea exitosa y fructífera».
La reunión fue acordada tras la visita del enviado especial de la Casa Blanca, Steve Witkoff, quien mantuvo una conversación de aproximadamente tres horas con el presidente ruso. Los resultados fueron evaluados positivamente por ambas partes.

Desde Washington, Trump también destacó la importancia del encuentro:
«Tuvimos hoy unas conversaciones muy buenas con el presidente Putin y hay grandes posibilidades de que podamos estar cerrando el camino», dijo refiriéndose al conflicto ucraniano.
También aseguró que «hay muchas posibilidades de que finalmente le estemos poniendo fin», aunque reconoció que «este proceso fue y sigue siendo largo».
Por su parte, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmó que el presidente estadounidense «está abierto a reunirse tanto con Putin como con Zelenski», aunque todo indica que el primer paso será la reunión bilateral con Moscú.
Mientras los equipos diplomáticos afinan detalles, la comunidad internacional observa con atención lo que muchos ya consideran un momento decisivo. Si las expectativas se cumplen, la cumbre Putin-Trump podría marcar un punto de inflexión en el prolongado conflicto en Europa del Este.