Pese a las sanciones impuestas por el gobierno de Estados Unidos a Venezuela, la petrolera española Repsol reiteró su interés en mantener su presencia operativa en el país caribeño, valorando la importancia estratégica de Venezuela como proveedor energético confiable y aliado clave en materia de gas natural.
Durante la presentación de resultados del primer trimestre de 2025, el consejero delegado de la compañía, Josu Jon Imaz, informó que Repsol mantiene conversaciones con las autoridades estadounidenses para preservar sus activos y garantizar la continuidad de sus operaciones en suelo venezolano.
«Trabajamos con las autoridades de Estados Unidos para preservar nuestros activos en Venezuela y mantener nuestras operaciones en el futuro, donde el 85% de nuestra producción corresponde a gas natural” señaló Imaz citado por la agencia EFE.

¿Venezuela es la salvación?
Más allá de las amenazas de la administración Trump, la permanencia en Venezuela podría ser para Repsol no sólo una apuesta a futuro, sino una necesidad táctica para mitigar el impacto de sus pérdidas globales.
Los resultados financieros mostrados por Repsol reflejan una caída sustancial de las ganancias netas de la compañía, que pasaron de 969 millones de euros en 2024 a 366 millones este año.
Su producción también se redujo en 8,5%, y la compañía señaló que sus márgenes de ganancias se han visto presionados por factores externos como la volatilidad de los precios y las restricciones comerciales impuestas a ciertos mercados.
En ese contexto, Venezuela representa para Repsol una oportunidad difícil de reemplazar: acceso a reservas energéticas, operaciones ya establecidas y un enfoque en el gas natural, considerado estratégico dentro de la matriz de transición energética.
Efecto Trump
A raíz de la decisión del Gobierno de EEUU de revocar la licencia a la petrolera española Repsol que opera en Venezuela, las acciones de esta empresa cayeron un 3% en la Bolsa de Madrid, lo que la ha situado entre los peores valores del Ibex 35, principal índice bursátil de referencia en la bolsa del país ibérico.
Tras la caída bursátil, la petrolera española anunció que está buscando mecanismos para continuar con su actividad en la nación suramericana, lo que incluye una «relación directa» y un «diálogo fluido» con Washington, de acuerdo a medios del país ibérico.
En ese momento, el ministro de Relaciones Exteriores de España, José Manuel Albares, reaccionó diciendo que el gobierno de España «defenderá los intereses de Repsol y de cualquier empresa española«.
Fue el domingo 30 de marzo cuando el presidente de EEUU, Donald Trump, notificó la revocación de los permisos a las petroleras que operan en Venezuela, por lo que debieron liquidar sus compromisos comerciales con el país suramericano antes de finales de mayo.
Las petroleras afectadas por esta medidas son Repsol (España), junto a Global Oil Terminals (EEUU), Eni (Italia), Maurel & Prom (Francia) y Reliance Industries (India).
La francesa Maurel & Prom (M&P) había informado que se encuentra evaluando con sus abogados las implicaciones de esta decisión del gobierno estadounidense.
Por su parte, Eni, confirmó que ya no podrá seguir recibiendo pagos de PDVSA por su producción de gas en Venezuela, debido a la nueva medida promovida por Washington.
La revocación de las licencias petroleras por parte de Trump se suman, además, al arancel del 25% a los países y entidades que comercialicen con el petróleo y el gas venezolano.