El partido Un Nuevo Tiempo (UNT) pidió a la oposición extremista en Venezuela respetar su derecho a participar en las elecciones regionales y parlamentarias del 25 de mayo.
Omar Barboza, dirigente de UNT, solicitó que la campaña electoral, que inició este martes 29 de abril en Venezuela, no se convierta en un «torneo de descalificaciones» entre sectores adversos al chavismo.
«Votar es una manera de mantener la resistencia democrática», declaró citado por el medio local La Verdad.
Barboza, exsecretario general de la llamada Plataforma Unitaria Democrática, que agrupa a la oposición extremista, hizo un llamado a esta coalición que promueve la abstención en la base electoral opositora. «Respetemos las diferencias tácticas o de otro tipo entre nosotros, aunque cada parte considere tener los mejores argumentos para sustentar su posición», sostuvo.
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En marzo pasado, el vicepresidente de UNT, Luis Emilio Rondón, candidato a diputado, defendió la decisión de esa tolda política de participar en las elecciones.
«Nadie obligó a nadie, no se les ofreció nada», dijo ante señalamientos de sectores extremistas opositores que indican que la cúpula de UNT obligó a sus militantes a sumarse a la campaña electoral.
Con este pronunciamiento, el partido UNT intenta aminorar la lluvia de críticas por parte de la extrema derecha, encabezada por María Machado, tal como le sucedió a Henrique Capriles Radonski cuando se conoció su inscripción como candidato a diputado.
¿Cuántos partidos participan en estas elecciones?
Este 29 de abril comenzó en Venezuela la campaña electoral para las elecciones regionales y de Parlamento, en la cual participarán 54 partidos políticos y 6.687 candidatos y candidatas para los cargos de diputados a la Asamblea Nacional, consejos legislativos y gobernadores.
Para estas elecciones, el chavismo participará con candidaturas unitarias agrupadas en el Gran Polo Patriótico, un bloque que reúne a los movimientos de izquierda y organizaciones afines al proyecto de la revolución bolivariana.
En tanto, el antichavismo se mantiene fragmentado en varios bloques: uno, dominado por la extrema derecha que llama a la abstención, y otros grupos que sí participarán en los comicios, pero divididos con candidatos propios, tanto por estados como por cargos de diputados.