Esta jueves 28 de agosto, las autoridades ruandesas confesaron que desde mediados de agosto se encuentran en Kigali, la capital de Ruanda, siete migrantes deportados desde los Estados Unidos, según medios locales se trata del primer grupo de deportados con destino al país ubicado en la región de los grandes lagos en África, que ha sido cuestionado en los últimos años por no garantizar los derechos humanos de sus habitantes y por participar en varios conflictos con los países vecinos.
Las autoridades de Ruanda no informaron de las nacionalidades de los siete deportados, según medios occidentales los 7 migrantes llegaron al país como parte del acuerdo bilateral con Washington anunciado a principios de agosto, donde Ruanda se comprometía en acoger hasta 250 migrantes desde EE.UU.
En este contexto, el portavoz del gobierno de Ruanda, Yolande Makolo, declaró que su país “recibió a siete migrantes que llegaron a mediados de agosto. Tres de ellos han expresado su deseo de regresar a sus países de origen, mientras que cuatro desean quedarse y reconstruir sus vidas en Ruanda”.

El gobierno de Ruanda al recibir migrantes de terceros países, se convierte en el cuarto país de África que acoge ciudadanos expulsados desde los Estados Unidos, y se suma a la campaña de deportación arbitraria de la administración de Donald Trump, como ya han hecho Sudán del Sur, Esuatini y Uganda.
Además, Yolande Makolo dijo que los migrantes de que se recibieron han sido “acogidos por una organización internacional”. A esta línea se sumaron, agencia de prensa internacional que reportan que los recién llegados a Ruanda fueron recibidos por la Cruz Roja, y se estarán quedando presuntamente en las instalaciones de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), del país africano.
Sin embargo, un comunicado de la OIM negó su participación en la operación de deportación, “La OIM no apoya ni facilita la deportación. La OIM está visitando a los migrantes para evaluar sus necesidades básicas, de conformidad con nuestro mandato y en cooperación con el Gobierno de Ruanda”, afirmó.
Al mismo tiempo, un trabajador de la OIM en condición de anonimato, confesó que presuntamente han llegado más de 30 migrantes desde los Estados Unidos, y se prevé que otro grupo llegue en los próximos días.
No obstante, Ruanda, en otros tiempos ya ha suscrito acuerdos similares de recibir deportados desde países como Israel y el Reino Unido, a pesar que este último canceló el envio por orden de un tribunal ya que se estaría violando los derechos humanos de las personas.
La Administración Trump tratara de alcanzar récords de deportación
Según el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), la administración de Trump ha deportado alrededor 200.000 personas desde que llego al poder.
Sin embargo, las deportaciones del año 2014, durante la Administración del gobierno demócrata de Barack Obama, el ICE y la Guardia Costera logró deportar a 316.000 personas.
El republicano Trump, desea superar el ranking de la administración de Obama respecto a las deportaciones, por lo que ha decidido inyectar más dinero a través de ley de presupuesto a las agencias gubernamentales dedicadas al cuidado de las fronteras y la detención de migrantes como el ICE, la CBP y la Guardia Costera, los incrementos de presupuesto supera los 75.000 millones de dólares hasta 2029