Moscú rechaza las acusaciones de la ministra argentina de Seguridad, Patricia Bullrich, que señaló a la inteligencia rusa de participar en una grabación ilegal en la Casa Rosada.
La ministra de Seguridad apuntó a la inteligencia rusa como supuesta responsable de una grabación ilegal realizada en la Casa Rosada, que involucra a Karina Milei, hermana y secretaria general de Presidencia.
A través de un comunicado, el Ministerio de Exteriores ruso informó que «se le comunicó al embajador de Argentina que la parte rusa rechaza firmemente las acusaciones» de la ministra, calificándolas de «infundadas» y sin pruebas que las respalden.
Rusia recordó la existencia de un Tratado de asistencia legal recíproca en materia penal entre ambos países, que establece un procedimiento formal para la interacción de sus estructuras competentes.
Moscú lamenta que las declaraciones de Bullrich «no ayuden a mantener relaciones constructivas de amistad» y que Buenos Aires «no esté dispuesto a avanzar en el camino de su desarrollo progresivo».