Familiares de Chad Joseph, el pescador trinitario de 26 años asesinado en uno de los 22 ataques a embarcaciones en el Caribe perpetrados por Estados Unidos, están considerando presentar una «petición de derechos» ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), sumándose al creciente rechazo internacional por estos bombardeos que se han cobrado la vida de 86 personas.
Esta declaración se da luego de que que la familia del pescador colombiano Alejandro Andrés Carranza Medina tomaran esta misma medida contra Estados Unidos ante el organismo interamericano de DDHH.
Según reportan Trinidad Express, los familiares de Joseph, están considerando tomar esta misma acción, debido a la negativa de su propio gobierno y de Washington, de tomas alguna acción, señaló Lynette Burnley, tía de Joseph.
No obstante, Burnley rechazó cualquier vínculo con el narcotráfico. Dijo que viajaba a menudo entre Trinidad y Venezuela para trabajar, no para traficar drogas. «Estaba trabajando. Ayudando a la gente que lo visitaba, limpiando terrenos y atendiendo una granja».
Aunque la familia presentó una denuncia por desaparición, no han recibido respuesta de la policía, de la primera ministra Kamla Persad-Bissessar ni de su gobierno. «No hemos recibido nada, nada, nada. Solo nos contactan en redes sociales, nada del gobierno», dijo.
Cuando se le preguntó sobre el apoyo del gobierno a la campaña en curso y las recientes declaraciones de Hegseth de que Estados Unidos de que los ataque continuarán señaló que «todos tienen que pagar por eso porque son almas inocentes las que están tomando».
Se cree que Joseph es una de las seis personas, incluido otro trinitense Rishi Samaroo, que murieron en un ataque estadounidense el 12 de octubre llevado a cabo en el Caribe como parte de lo que el Departamento de Guerra de Estados Unidos ahora llama Operación Lanza del Sur.
Estados Unidos ha afirmado que posee información de inteligencia sobre las personas a bordo de los barcos, sus supuestas asociaciones con grupos de narcotráfico en la región y su paso por conocidas rutas de narcotráfico, aunque no ha revelado públicamente ninguna prueba.
La demanda en nombre de la familia de Carranza, presentada a través del abogado de Pittsburgh, Dan Kovalik, busca impugnar la campaña estadounidense de ataques a embarcaciones y obtener una indemnización para los familiares tras su muerte. Es la primera de este tipo desde que Estados Unidos comenzó a atacar presuntas embarcaciones con narcotráfico el 2 de septiembre, y en medio de su despliegue militar con múltiples buques de guerra, el portaaviones USS Gerald R. Ford y 15.000 soldados en el Caribe.
La petición argumenta que Carranza murió en el segundo ataque estadounidense en la región el 15 de septiembre de 2025, en violación de las convenciones de derechos humanos. Afirma, según informó The Guardian, que Carranza navegaba por el Caribe frente a la costa colombiana cuando su embarcación fue impactada, y se refirió a su muerte como un asesinato y una ejecución extrajudicial.
“Por numerosos informes de prensa, sabemos que Pete Hegseth, Secretario de Defensa de Estados Unidos, fue responsable de ordenar el bombardeo de embarcaciones como las de Alejandro Carranza Medina y el asesinato de todos los que estaban en dichas embarcaciones… El Secretario Hegseth ha admitido que dio tales órdenes a pesar de que desconocía la identidad de los que estaban siendo blanco de estos bombardeos y ejecuciones extrajudiciales”, afirma la petición.
La demanda en nombre de la familia de Carranza, presentada a través del abogado de Pittsburgh, Dan Kovalik, busca impugnar la campaña estadounidense de ataques a embarcaciones y obtener una indemnización para los familiares tras su muerte. Es la primera de este tipo desde que Estados Unidos comenzó a atacar presuntas embarcaciones con narcotráfico el 2 de septiembre, y en medio de su despliegue militar con múltiples buques de guerra, el portaaviones USS Gerald R. Ford y 15.000 soldados en el Caribe.

