Fracasó el plan del gobierno de Colombia para controlar la población de hipopótamos de la hacienda de Pablo Escobar. Entre otros motivos, porque los costos para controlar a estos animales son muy altos; esterilizar a un solo animal puede costar 9.700 dólares.
Los hipopótamos son una especie invasora de rápido crecimiento en el centro del país, el plan gubernamental no ha tenido avances y cada vez será más costosa su implementación, por lo que se calcula que la población total de animales llegaría a los 1.000 ejemplares en 2035.
Así lo alertó Germán Jiménez, profesor asociado e investigador en manejo y conservación de fauna silvestre de la Universidad Javeriana de Bogotá.
«No ha pasado nada. Pese a que se sancionó un plan el año pasado y de que se hicieron algunas propuestas, no veo ninguna actividad», dijo a EFE Jiménez al referirse a los hipopótamos que llegaron a la región del Magdalena Medio en los años 80 traídos por el capo del narcotráfico Pablo Escobar para la Hacienda Nápoles, su finca de recreo, y se han reproducido sin control.
En septiembre del año pasado el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible presentó un plan para disminuir el número de hipopótamos, que se han convertido en una amenaza para las especies nativas, cultivos y habitantes de la localidad de Puerto Triunfo, en el departamento de Antioquia.
El hipopótamo es el tercer animal terrestre más grande, después del elefante y el rinoceronte blanco, y el plan del Ministerio de Ambiente de Colombia busca también prevenir y mitigar sus impactos sobre las comunidades locales y los ecosistemas.
Las medidas anunciadas fueron el traslado (translocación), la esterilización quirúrgica y el confinamiento y, como último recurso, la eutanasia, bajo «altos estándares de bienestar animal».
Por el alto costo y las dificultades logísticas del caso, el plan cayó en un pantano que fortalece a los hipopótamos de Pablo Escobar.
Ahora, el presidente colombiano Gustavo Pedro ha dicho: «Yo quiero (…) por sobre todas las cosas, que esa hacienda vuelva a manos del campesinado. Es de utilidad pública, porque llevaron tantos animales al zoológico que hay un problema de salud, de peligro para la sociedad», indicó Petro sobre la hacienda, donde Escobar tenía una colección de animales exóticos no propios del lugar, entre ellos varios hipopótamos que escaparon y se reprodujeron y ahora causan serios problemas en varias zonas del país.
Hipopótamos, uno de los caprichos de Pablo Escobar
Colombia enfrenta el problema de los hipopótamos desde hace más de 30 años cuando Escobar introdujo cuatro ejemplares al país para su zoológico privado. Con la muerte del narcotraficante, en diciembre de 1993, comenzó la decadencia de la Hacienda Nápoles y los animales escaparon pero encontraron en la región del Magdalena Medio un hábitat perfecto, con toda la comida que necesitan, buen clima y sin enemigos naturales.
De hecho, en una de las medidas asumidas para controlar la población de hipopótamos, las autoridades los cazaron para reducir su número. La película colombiana Pepe, documenta esa tarea.
Si no hay acciones prontas, lo que va a suceder, aseguran expertos, es que los animales van a seguir multiplicándose y a eso se puede sumar el tráfico ilegal de crías y que, incluso, haya hipopótamos que salgan de la cuenca en la que viven y se vayan a otras partes.
El panorama se oscurece más porque, a medida que avanza el tiempo, los costos y la logística para controlar a los hipopótamos se encarecen. El tema da para todo tipo de señalamientos en redes sociales.
Con información de EFE y El Informante de Colombia