En un tono visiblemente molesto, el presidente de EE.UU., Donald Trump, instó este sábado a «no malgastar tiempo y energía en Jeffrey Epstein», acusando a “personas egoístas” de perjudicar a su administración al mantener vivo el debate sobre el fallecido magnate, condenado por tráfico sexual de menores.
Sin embargo, sus palabras fueron rápidamente ridiculizadas por Elon Musk, quien exigió la publicación completa de los archivos del caso.
“Tenemos una Administración perfecta, que es el tema de conversación en todo el mundo, y personas egoístas están tratando de perjudicarla, todo por culpa de un tipo que nunca muere, Jeffrey Epstein”, escribió Trump en su cuenta de Truth Social.
El mandatario también disparó contra el gobierno anterior al suyo: “¿Por qué estos lunáticos de la izquierda radical no publicaron los archivos Epstein? Si había algo en ellos que pudiera perjudicar al movimiento MAGA, ¿por qué no lo utilizaron?”, cuestionó, señalando a los “perdedores y criminales” de la administración Biden como responsables de haber creado los polémicos archivos.
Trump aseguró que las agencias federales deberían enfocarse en otras prioridades: “El director del FBI, Kash Patel, debe investigar el fraude electoral, la corrupción política, ActBlue, las presidenciales amañadas y robadas de 2020… no perder el tiempo revisando los mismos viejos documentos inspirados por la izquierda radical sobre Epstein”.
El presidente finalizó su mensaje defendiendo a su fiscal general, Pam Bondi, y remató con una frase tajante: “Hace un año nuestro país estaba muerto, ahora es el más impresionante del mundo. Mantengámoslo así y no malgastemos tiempo y energía en Jeffrey Epstein, alguien a quien nadie le importa”.
La respuesta de Musk a Trump: sarcasmo y exigencia.

La reacción no tardó en llegar. Elon Musk, fundador de Tesla y SpaceX, utilizó su red social X para burlarse de las declaraciones del mandatario. “En serio. Dijo ‘Epstein’ media docena de veces mientras les decía a todos que dejaran de hablar de Epstein”, ironizó. Luego exigió: “Solo publiquen los archivos como prometieron”.
Al inicio de su segundo mandato, Trump había prometido desclasificar documentos clave sobre el caso Epstein, uno de los escándalos más oscuros y polémicos de la élite estadounidense. Sin embargo, los primeros documentos revelados apenas contenían información ya conocida públicamente, lo que ha provocado malestar dentro del movimiento MAGA y ha avivado diversas teorías conspirativas.
La mayor controversia gira en torno a la famosa “lista de clientes” de Epstein de la que Trump formaría parte. En febrero, Pam Bondi aseguró que el documento estaba “sobre su escritorio pendiente de revisión”, pero esta semana el Departamento de Justicia y el FBI negaron su existencia.
Además, aunque las autoridades reiteraron que Epstein se suicidó el 10 de agosto de 2019, una grabación de las cámaras de vigilancia mostró un extraño salto de casi un minuto —de las 23:58:58 a las 00:00:00— lo que ha generado más interrogantes sobre si realmente se trató de un suicidio o de una operación para silenciarlo.
Mientras tanto, la presión pública sobre Trump aumenta. Lo que comenzó como una promesa de transparencia, hoy se ha convertido en un punto débil en su presidencia, con voces como la de Musk quien lo acusa directamente de estar en esa lista, dejando en evidencia las contradicciones del propio mandatario.